Cuáles son los once lugares clave que debería dejar La Cámpora si rompiera con el Frente de Todos
La organización que dirige Máximo Kirchner ocupa puestos con importantes cajas y relevancia política tanto en el Ejecutivo nacional como provincial.
El comunicado de renuncia a la jefatura de bloque de diputados del Frente de Todos (FDT) de Máximo Kirchner volvió a jaquear la tranquilidad interna del Gobierno. No solo puso en tela de juicio el reciente entendimiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) sino que también cuestionó el proyecto de Alberto Fernández en términos económicos. En diálogo con El Canciller, un halcón puro planteó que “el Presidente tiene un enorme problema y no es solamente la votación (del proyecto)” y se preguntó: “¿Quién va a ejecutar las políticas fiscales de este acuerdo? La votación es una parte nada más, no te garantiza que se va a ejecutar”.
Lo cierto es que La Cámpora ocupa puestos de alto calibre tanto en la administración nacional como en la de la Provincia de Buenos Aires. “La Cámpora puede usar esos puestos para ir en contra del programa económico que defina el Presidente”, señaló el hombre del núcleo duro del PRO. ¿Cuáles son esos lugares clave que la organización política debería dejar en caso de romper definitivamente con el Gobierno?
• Ministerio del Interior. Uno de los integrantes de la cúpula de La Cámpora es, a su vez, una de las figuras más relevantes del Gabinete nacional: Eduardo ‘Wado’ De Pedro. El presupuesto destinado a esta cartera en 2021 fue de $71.000 millones. Además, el área se encarga de administrar los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), fondos que representan el 1% del total de impuestos participables y que se distribuyen entre provincias y municipios para atender desequilibrios financieros y situaciones de emergencia.
• PAMI. Con un mayor presupuesto para el año pasado, que llegó a los $456.400 millones, el Programa de Atención Médica Integral –la obra social de los jubilados y jubiladas– comandado por Luana Volnovich, es una de las cajas más pesadas que ostenta La Cámpora. Un lugar recientemente discutido producto de la polémica del viaje de la funcionaria a México junto a su segundo en la línea, Martín Rodríguez –de la misma organización–, quien perdió su puesto a raíz del escándalo.
• Anses. La Administración Nacional de Seguridad Social es un organismo clave en la estructura del Estado que se encarga de gestionar las prestaciones de política social –por ejemplo asignaciones familiares, subsidios por desempleo, AUH, servicio previsional–. Es una gran herramienta de cercanía con la población. A causa del “martes negro” donde los jubilados se aglomeraron en las puertas de los bancos en medio de la pandemia, su extitular Alejandro Vanoli perdió su cargo, y su reemplazante fue Fernanda Raverta. La actual presidenta es acompañada por otro compañero de su organización que se desempeña como secretario general del órgano, Santiago Fraschina.
• Aerolíneas Argentinas. La compañía de bandera es un símbolo de La Cámpora. Durante las presidencias de Cristina Fernández de Kirchner, su gestión estuvo a cargo de Mariano Recalde, otro de los principales popes de la agrupación. Hoy ese lugar es ocupado por Pablo Ceriani, hombre cercano al actual senador nacional.
• YPF. Con la salida de Guillermo Nielsen en medio del rebote de la célebre frase de los “funcionarios que no funcionan” que lanzó la Vicepresidenta, su reemplazo fue Pablo González que, al igual que el CEO Sergio Affronti, no pertenecen a la organización de Máximo pero sí mantienen un estrecho vínculo con CFK. No obstante, en la petrolera estatal La Cámpora mantiene una gran cantidad de cuadros en su organigrama: los principales son Santiago “Patucho” Álvarez –a cargo de Asuntos Corporativos, Marketing y Comunicación– y Santiago Carreras –encargado de los sponsors deportivos, sobre todo en el fútbol–.
• Correo Argentino. Otra empresa del Estado es comandada por una camporista. Se trata de Vanesa Piesciorovski, quien fue además vicepresidenta de la compañía entre 2011 y 2015. La funcionaria asumió su actual cargo en enero de 2020.
• DGI. Sus siglas no son tan conocidas como las del órgano de la cual depende: AFIP. Si bien la titularidad de la Administración Federal de Ingresos Públicos está en manos de Mercedes Marcó del Pont, una de las principales direcciones la maneja Virginia García. La exsenadora nacional es también tía de los nietos de Cristina Kirchner y dirige la Dirección General Impositiva, que se ocupa de la aplicación, percepción, recaudación y fiscalización de impuestos nacionales en el país.
• Desarrollo social bonaerense. En el Gabinete de la Provincia de Buenos Aires también hay alfiles de Máximo Kirchner. Con la salida de Raverta del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, cartera que implementa la mayor parte de las políticas públicas sociales de la Gobernación, quien asumió en su lugar fue Andrés ‘Cuervo’ Larroque, otro peso pesado dentro de la estructura camporista.
• Ambiente bonaerense. Tras la derrota en las legislativas de 2021, Axel Kicillof incorporó nuevos actores al Ejecutivo provincial. Una de ellas fue Daniela Vilar, que hasta entonces se desempeñaba como diputada nacional y que pasó encabezar el nuevo Ministerio de Ambiente en el distrito más poblado del país.
• IPS. Pero en PBA hay otros cargos relevantes ocupados por la agrupación de jóvenes kirchneristas. Un ejemplo es el de la presidencia del Instituto de Previsión Social, ocupada por Marina Moretti, quien migró de la Anses de Raverta a organismo provincial hace tres semanas para orientar la política de prevención social en territorio bonaerense, una de las funciones del órgano.
• AABE. La Agencia de Administración de Bienes del Estado es también otro lugar sensible de la administración bonaerense. Su titularidad no quedó en manos de La Cámpora, pero el segundo en la línea es Juan Debandi, excandidato a intendente de Tres de Febrero en 2019 e integrante de la organización.