El presidente saliente, Alberto Fernández, se despidió este miércoles de los trabajadores de la Casa Rosada y, durante durante un breve discurso realizado en uno de los patios interiores del Palacio de Gobierno, aseguró: “Me voy por la misma puerta que entré, con el mismo auto con el que entré y me voy a la misma casa de donde salí, con la tranquilidad de haber puesto todo lo que tenía que poner para ayudar en este tiempo”.

“Me voy con la tranquilidad de haber recompuesto el salario de los trabajadores estatales, aunque tengo un enorme pesar de no haber podido resolver el problema de la pobreza”, lamentó. Sin embargo, remarcó: “Me voy con la tranquilidad de no haber tomado nunca una decisión en contra de los que menos tienen”.

A su vez, el mandatario sostuvo que deja “un país que está funcionando”. En este sentido, en referencia a Javier Milei, quien asumirá la Presidencia este domingo 10 de diciembre, remarcó: “El que me sucede no tiene que recibir un país que el año siguiente debe pagar 19.000 millones y al otro 18.000 como el que me tocó a mí”.

TE PODRÍA INTERESAR: Los detalles del bastón presidencial: cómo fue confeccionado y qué disputa hubo en la familia Pallarols

“No tiene que recibir 10 puntos de desocupación, recibe la tasa más baja en muchos años”, aseguró. Asimismo, destacó que el Presidente electo “va a recibir 7.000 obras públicas nuevas, va a ver que hay 140.000 familias que no tienen problemas de viviendas porque el Estado se los dio, que hay 95.000 obras en proceso de construcción, y va a encontrar universidades en marcha y mejoradas”.

En este marco, denunció que al asumir encontró a la salud pública “cerrada y diezmada, con el sarampión dando vuelta”. En contraposición, aseguró que Milei “la encontrará funcionando a pleno; un satélite más en orbita” y agregó: “El que me sucede encontrará que si el Covid vuelve a aparecer ya no va a tener que correr para ver quién le vende la vacuna porque se la hicieron los científicos argentinos”.

Por otro lado, Fernández valoró la labor del personal estatal “tan injustamente maltratado” y se refirió a dichos trabajadores como “la columna que mantuvo el Estado en marcha”. En este sentido, destacó: “Nada de lo que logramos lo hubiéramos podido lograr sin el apoyo de cada uno de ustedes, de los que están aquí”.

“No quería irme sin dar las gracias a todos. Fueron cuatro años muy difíciles, tanto que mucho tiempo no pudimos compartirlo en los pasillos porque la pandemia nos obligó a trabajar a distancia, pero en todo momento estuvieron, trabajaron, hicieron lo que debemos hacer por este país que es ponerlo de pie”, reconoció.

En la despedida de este miércoles también estuvieron presentes la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti; y los secretarios de la Presidencia, Julio Vitobello; y de Asuntos Estratégicos, Mercedes Marcó del Pont.