Alberto Fernández reapareció este miércoles y encabezó un acto en Neuquén, donde se refirió a los saqueos de los últimos días, a las medidas que se anunciarán para mitigar el efecto de la devaluación del Banco Central y a su silencio tras las elecciones.

El Presidente se dirigió a aquellos que lo apuntan por sus escasas apariciones públicas durante los últimos días: "Estaban todos preocupados por mi agenda, sobre qué estoy haciendo, decían 'por qué no habla'. Básicamente no hablo porque no soy candidato. Soy Presidente, tengo que seguir trabajando y, como soy un demócrata, presto atención a lo que dice el pueblo cuando vota".

Acompañado por el gobernador local, Omar Gutiérrez, y por el ministro de Hábitat, Santiago Maggiotti, Fernández se refirió a la ola de ataques a comercios que se vieron en distintos puntos del país en los últimos días. “Evidentemente estuvieron organizados”, sostuvo el mandatario.

Asimismo, adelantó que el Gobierno prepara una "batería de medidas para remediar los efectos de la devaluación", que se van a comunicar entre el jueves y el viernes.

"Les pido a todos los argentinos que cuidemos la paz social, que nosotros nos vamos a ocupar de resolver los problemas de los argentinos con sus ingresos", añadió el jefe de Estado. 

"Que no nos rompan la tranquilidad pública, que no nos rompan la paz social, que no nos rompan la convivencia democrática. Hemos vivido mucha violencia en Argentina para seguir soportando violencia", afirmó.

En otro pasaje del discurso, agregó que “durante estos cuatro años hubo un Presidente que dio lo mejor de él” y que deja una Argentina que "está caminando, con un 5 por ciento de desocupación".   

El Presidente también se expresó sobre el resultado de las PASO del pasado 13 de agosto y dijo entender que "hay muchos reclamos" contra su Gobierno, pero reiteró que dio "lo mejor para que Argentina esté de pie": "Nos ha tocado un tiempo muy ingrato", concluyó.