En el marco de su campaña para captar votantes indecisos y luego de la reunión que mantuvo la semana pasada con Juan Schiaretti, Alberto Fernández regresará este jueves a la provincia de Córdoba, donde permanecerá 48 horas para tener encuentros con dirigentes peronistas y encabezar actos proselitistas. El encargado de gestionar el nuevo desembarco y el nexo del precandidato presidencial por el Frente de Todos en el distrito es Carlos Caserio, quien reemplazó a Miguel Ángel Pichetto como titular del bloque del PJ en el Senado.

Previo a su desempeño dirigencial, Caserio fue maestro en un colegio en la localidad bonaerense de Martín Coronado y militó en Montoneros en plena dictadura, por lo que debió refugiarse en la provincia de Santa Fe, donde trabajó en la empresa de tractores Deutz. 

Cuando se trasladó a la localidad cordobesa de Valle Hermoso se inmiscuyó en la política. Entre 1998 y 1999 fue subsecretario de mercado y alimentos de la secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, durante la presidencia de Carlos Menem. En 2003, ministro de Obras Públicas de la provincia, cuando el extinto José De la Sota había arribado al poder. Con el exgobernador, edificó una amistad que perduró hasta su fallecimiento, el año pasado, en un accidente automovilístico.

Carlos Caserio, el nexo de Alberto (en campaña) de regreso a Córdoba

Luego de una década de trabajo dentro de Córdoba, saltó a la escena nacional en 2013, al ser elegido diputado nacional por su provincia. En 2015, pasó a la Cámara alta. En el ballotage presidencial de aquel año, fue el encargado de anunciar que el espacio de De la Sota no apoyaría ni a Scioli ni a Macri, dejando abierta la posibilidad del voto en blanco. Sin embargo, en los últimos días aseguró haber votado al exgobernador bonaerense

El actual presidente del PJ cordobés nunca tuvo relación con Cristina Fernández de Kirchner. En las legislativas de 2017 lo dejó en claro. "Todos sabemos que, con Cristina, el peronismo no puede volver al poder. El peronismo cordobés nunca estuvo con Cristina y tampoco vamos a estar con ella en el futuro", lanzó.

Más moderado en su discurso desde que el exjefe de Gabinete de Néstor Kirchner fue ungido candidato, ahora afirma: "Sin dudas que durante las gestiones de Cristina Fernández se discriminó a Córdoba. Pero el próximo presidente será Alberto Fernández y no es lo mismo". El precandidato a presidente aseguró "estar contento" de que el reemplazante de Pichetto sea Caserio.

Carlos Caserio, el nexo de Alberto (en campaña) de regreso a Córdoba

Pese a las recurrentes críticas al Gobierno nacional, en el Congreso votó la mayoría de las leyes que le proporcionaron gobernabilidad, entre ellas la reforma previsional de diciembre de 2017. También alzó la voz para que se legalizara el aborto en agosto del año pasado.

Desde su posición jerárquica en el distrito cordobés, introdujo a su familia en importantes cargos provinciales. Con la firma del decreto 2.305 delegó a su hija, Mariana, como secretaria de Juventud. Luego, se desempeñó como vicepresidenta del Ente Regulador de los Servicios Públicos (Ersep), cargo que le cedió, en diciembre de 2015, a su madre, Alicia Narducci, que acababa de finalizar su segundo mandato en la Legislatura provincial.

A Narducci la reemplazó Mariana Caserio, que actualmente es candidata a la intendencia de Villa Carlos Paz. Precisamente, Alberto Fernández encabezará un acto en dicha ciudad el viernes. 

Carlos Caserio, el nexo de Alberto (en campaña) de regreso a Córdoba

La provincia gobernada por Juan Schiaretti concentra a un 9% del padrón electoral y en el ballotage de 2015 tuvo un rol decisivo en la llegada de Macri a la Casa Rosada, ya que allí el presidente se impuso sobre Daniel Scioli por 700.000 votos. 

En la fugaz visita de la semana pasada, Fernández le pidió perdón a la provincia "por las desinteligencias durante el gobierno de Cristina” y dijo que iba a instalarse en Córdoba "varios días para convencer a la gente de que lo vote”.