Reforma del Consejo de la Magistratura: cinco puntos clave sobre el proyecto que enviará el Ejecutivo al Congreso
Buscará “una representación más equilibrada”, incrementará su cantidad de integrantes e incorporará la equidad de género. La ‘primereada’ del Gobierno a la Corte.
La portavoz oficial de la Presidencia Gabriela Cerruti anticipó días atrás que el Ejecutivo enviará al parlamento un proyecto de reforma de la composición del Consejo de la Magistratura, el órgano constitucional, independiente y multisectorial que administra el Poder Judicial y controla, designa y sanciona a los jueces. El documento ingresará por el Senado en las próximas horas.
• Qué busca. Según Cerruti, la iniciativa permitirá “una representación más equilibrada dentro del Consejo de la Magistratura" y ayudará a "avanzar en uno de los objetivos centrales, que tiene que ver con recuperar la confianza de la sociedad en la justicia, garantizar la independencia del Poder Judicial y un trabajo armónico en el Consejo”.
• Qué modificará. El proyecto no prevé cambios en el funcionamiento del órgano, pero sí en su composición. Desde su reforma en 2006, el Consejo está integrado por 13 miembros. La actual propuesta del Gobierno prevé sumar a un juez, un abogado y un representante del ámbito académico o científico. Todos ellos, por fuera del “estamento político”, tal como anticipó Cerruti. De esta manera, los 17 miembros que conformarán el Consejo serán cuatro jueces del Poder Judicial; seis legisladores del Congreso; cuatro abogados con matrícula federal; un representante del Poder Ejecutivo y dos académicos.
• Género. Actualmente, de 13 miembros solo cuatro son mujeres. Como elemento inédito, la propuesta también contemplará la equidad de género. Así, habrá tres parlamentarias, dos juezas, dos abogadas y una académica.
• ¿Más cambios? El proyecto solo se limita a modificar la estructura interna del Consejo. En cuanto a su funcionamiento no habrá cambios. Es decir, las mayorías especiales requeridas para las dos funciones centrales del Consejo –la presentación de ternas y la remoción de jueces– seguirán siendo mayorías agravadas.
• ‘Primerearon’. El Gobierno se anticipó al plan de la Corte Suprema de Justicia, que preparaba un fallo que plantearía la inconstitucionalidad de la última reforma de 2006 por tratarse de una composición “carente de equilibrio”. En ese caso, su conformación se hubiera retrotraído al momento previo a la modificación de ese año, donde eran 20 miembros y el presidente del cuerpo era un ministro del Máximo Tribunal. Con esta jugada, el Ejecutivo descartó esa posibilidad. "No estuvo en debate en 2006, ni en el proyecto que envió la anterior administración del ministro Germán Garavano y no está en debate ahora", despejó Cerruti.