El Tribunal Oral Federal N°2 condenó este miércoles al exsecretario de Comercio Guillermo Moreno a tres años de prisión, de ejecución condicional, y seis de inhabilitación para ejercer cargos públicos por encontrarlo culpable de manipular los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) con el objetivo de falsear los indicadores de inflación en 2006 y 2007, durante la presidencia de Cristina Kirchner.

Además del exfuncionario, fue sentenciada la exdirectora de Índices de Precio de Consumo (IPC) Beatriz Paglieri, quien recibió una pena similar. En tanto, las entonces empleadas del organismo Marcela Filia y María Celeste Cámpora Avellaneda, también acusadas, fueron absueltas.

Durante el proceso judicial, el fiscal Diego Luciani había pedido cuatro años de prisión y diez de inhabilitación para Moreno, acusado por los delitos de abuso de autoridad, destrucción de documentos públicos y falsedad ideológica de un instrumento público, mientras que la defensa exigía su absolución.

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En su alegato final, el exsecretario de Comercio sostuvo que fue un juicio "académico" en el que no hubo evidencias y apuntó, según consignó el diario La Nación: "Mi formación es de economista, pero he tenido algunas materia en derecho. Hay un viejo dicho que que dice algo así como hechos, pruebas, y derecho".

Ante el tribunal integrado por los jueces Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Guillermo Costabel, el también precandidato a presidente en 2023 advirtió que en la investigación "no surgió ninguna prueba" y subrayó: "Nadie puede decir si algo es falso o verdadero si no está la prueba".

"Hay que reconocer que el alegato del fiscal fue inteligente. No tenía pruebas. Y entonces apeló a un juicio académico. Ahora, como ustedes saben los juicios académicos lo pueden hacer los pares, no es facultad del fiscal", señaló y destacó: "Todos los gobiernos que sucedieron al nuestro han ratificado el buen desempeño del INDEC".

En su acusación, Luciani había denunciado que la alteración de "indicadores cruciales como el IPC afectó las mediciones de pobreza y estas manipulaciones han llevado a una desconfianza generalizada de las estadísticas oficiales". A su vez, remarcó: "Moreno llevó las riendas de la maniobra. Ejerció presiones necesarias para lograr la consumación de los delitos".