La preparación de los atletas argentinos para esta edición de los Juegos Olímpicos en Tokio fue tema de agenda en las semanas previas a la ceremonia inaugural. Desde deportes individuales y poco masivos como el judo, el tiro, el surf o la lucha, hasta los combinados grupales e inmensamente populares como la selección de fútbol, fueron analizados sobre cómo y dónde realizaban su previa de cara a los Juegos. Hoy, promediando la competición, un apartado especial puede hacerse sobre dos disciplinas colectivas que obtuvieron de los mejores resultados hasta el momento y coincidieron en el lugar de su preparación física.

Se trata de las selecciones de rugby masculino (en su modalidad seven, con siete jugadores por lado y dos tiempos de diez minutos, pero con las dimensiones normales del campo de juego) y de hockey femenino: ambas hicieron la pretemporada en las playas de Pinamar. Hasta ahora, Los Pumas son los únicos que lograron traer una medalla al país ganando el bronce contra un rival complicado, nada menos que Gran Bretaña. Las Leonas, por su parte, vencieron este lunes a Alemania y jugarán contra India para definir un puesto en la final y asegurarse así la segunda medalla para el país.

Para todos los deportistas, el contexto pandémico complicó tanto la preparación previa como las competencias. En esta coyuntura, ambos combinados decidieron aislarse y realizar su preparación y puesta a punto física y técnica en las playas de Pinamar, el municipio gobernado por Martín Yeza.

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Acostumbrado a recibir planteles en sus playas, el intendente había celebrado en junio la decisión de ambas delegaciones: "Gracias por esta amistad y confianza!", posteó en su cuenta de twitter. Además, hizo gala de su larga y buena relación con el histórico Carlos ‘Chapa’ Retegui, eterno seleccionador del hockey nacional.

Pinamar está acostumbrado a transformarse en refugio de distintos planteles. Muchos equipos de fútbol han optado por este destino para hacer sus pretemporadas, a veces vinculadas a competencias de verano y otras, más extensas, de cara a competencias importantes. En el caso de Los Pumas y Las Leonas (y Los Leones), el atractivo parece haber sido otro. La soledad de Pinamar en los meses previos a las vacaciones de invierno, el aire de mar y las ventajas de la arena para el entrenamiento de alto rendimiento, entre otros, fueron algunos de los factores determinantes.

Con los rugbiers ya en el país medalla de bronce al cuello, el próximo sueño es el de las chicas del hockey. Si vencen a India, que viene de dar el batacazo contra Australia, tendrán la plata o el oro asegurados; en caso de caer en las semifinales, podrán pelear el tercer puesto contra los Países Bajos o Gran Bretaña. De subirse al podio Las Leonas, quizá, Pinamar se vuelva una cábala olímpica.