El 2024 es un año que genera optimismo a la hora de hablar de la producción de soja y maíz, teniendo en cuenta las buenas condiciones climáticas y las lluvias recurrentes en grandes áreas de la región agrícola argentina. Según estimaciones privadas, se podrían generar las mejores cosechas de la historia, logrando exportaciones por un monto estimado entre USD 24.000 y USD 28.700 millones.

De esta manera, tendrían un salto de unos USD 10.000 millones respecto del 2023, año que fue severamente afectado por una de las peores sequías de las que se tenga memoria.

El gerente de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA), Ramiro Costa, estimó, en diálogo con Télam, que los ingresos por exportación de estos dos cultivos alcanzarían los USD 28.700 millones, "una cifra que supera en USD 10.000 millones a la registrada en la campaña anterior", a pesar de los menores precios internacionales que se registran en la actualidad.

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"Esta evolución permite sostener proyecciones optimistas de producción, sugiriendo un fuerte repunte después de la sequía pasada. Se estima que la producción de soja podría aumentar en más del 140%, mientras que el maíz podría experimentar un crecimiento superior al 60%", resaltó Costa. 

A pesar de esto, aclaró que "esta recuperación productiva se verá parcialmente contrarrestada debido a que las cotizaciones de la soja y el maíz están en menores niveles respecto de la campaña pasada", cuando el efecto del fenómeno climático “La Niña” hizo estragos en los campos locales.

Por otra parte, el director de la RIA Consultores, Javier Preciado Patiño, calculó ingresos más módicos en 2024 para estos dos complejos exportadores, claves en la economía del país. 

Según sus estudios, entre los tres principales productos exportables del complejo sojero sumarían ingresos por USD 16.266 millones, de los cuales la harina aportaría USD 9.009 millones, el aceite unos USD 4.401 millones y el poroto sin procesar USD 2.856 millones. 

“Hoy el mercado de la soja y el maíz están a la baja. A pesar de la indefinición de la cosecha de Brasil, la producción de soja en Sudamérica se espera que sea muy buena, con la Argentina y Paraguay con muy buenas producciones. Junto con una demanda más bien débil, la perspectiva es que los precios tenderán algo hacia a la baja. Lo mismo sucede con el maíz”, explicó Patiño. 

La última estimación fue realizada por la Bolsa de Comerio de Rosario (BCR), que habla de un ingreso total de USD 28.300 millones entre ambos cultivos. Además espera una cosecha récord del cereal de 59 millones de toneladas y de 52 millones en el caso de la oleaginosa. 

En cuanto a la recaudación vía retenciones, también se espera un salto muy importante, sobre todo si se aprueba la suba propuesta por el Gobierno nacional de los derechos de exportación del maíz y para derivados de la soja, algo que está en fuerte duda debido al rechazo por parte de la oposición más dialoguista a estos incrementos.

La intención oficial -incluida en el proyecto de la "Ley Bases" más conocida como “Ley Ómnibus”- propone elevar la alícuota del 12% al 15% para el grano amarillo y del 31% al 33% en el caso de la harina y el aceite de soja.

De aprobarse esta iniciativa, la recaudación vía retenciones en el complejo sojero significaría unos USD 198 millones más al pasar de USD 5.796 a USD 5.994 millones, mientras en el maíz el aporte adicional sería de USD 154 millones hasta un total proyectado de USD 1.224 millones, según las proyecciones de la Bolsa rosarina.