Según mediciones difundidas por el Instituto de Estadísticas de los Trabajadores (IET) de la Universidad Metropolitana (UMET) y el Centro para la Concertación y el Desarrollo (CCD) la inflación de junio promedió 5,5 por ciento y en el primer semestre del año ya acumula 37 por ciento.

Lo preocupante es que en los últimos 12 meses la suba de precios llega al 65,1 por ciento promedio, la cifra interanual más alta desde 1991. El difundido documento sugiere que si la inflación del segundo semestre fuera similar a la de los primeros seis meses (5,4 por ciento mensual en promedio), este año terminaría con una suba de precios acumulada cercana al 90 por ciento (alrededor de 87,9 por ciento). Para evitarlo, explica el texto,"la inflación debería ser inferior al 4,6 por ciento mensual en lo que resta del año para evitar que supere el 80 por ciento”.

Pese a los malos resultados, lo más preocupante es que dados los recientes acontecimientos, es casi seguro que julio mostrará una inflación aún más elevada que la de mayo y junio. De esta forma, desde el Gobierno se lamentan porque el anhelo de encaminar el país en un sendero de inflación decreciente se posterga, mientras la situación social se agrava al compás de un contexto político que repercute negativamente en el ámbito económico.

Inflación imparable: el dato de la UMET y el "anhelo perdido"

Claves sobre el documento de la UMET

• Ejes traccionadores del alza. La inflación de junio estuvo empujada por Recreación y cultura (+10,3 por ciento), debido a subas en TV por cable y paquetes turísticos (dada la proximidad con las vacaciones de invierno). En segundo lugar, Comunicaciones subió 9,3 por ciento, a causa de alzas registradas en servicios de telefonía.

 Mayores subas. El segmento de Alimentos y bebidas se encareció 5,9 por ciento acelerándose 0,5 puntos respecto al registro de mayo. Esto contrasta con lo sucedido en meses anteriores, cuando al Gobierno le jugó a favor la baja de productos como verduras y frutas, que en junio subieron de precio por razones estacionales. En sintonía, el documento aclara que se dispararon los precios de infusiones (particularmente yerba mate, afectada por la sequía en el NEA en el verano) y de aceites y grasas (con precios récord a nivel internacional).

 Otras alzas. Según el informe, segmentos como Salud trepó 5,7 por ciento y Equipamiento y mantenimiento del hogar 5,5 por ciento. Por debajo de la media, Se encuentra Transporte (4,7 por ciento), Vivienda (4,2) y "Otros bienes y servicios" (3,5 por ciento).

 Las subas moderadas. Los únicos rubros que subieron menos de 3 por ciento fueron Enseñanza (2,6 por ciento) e Indumentaria y calzado (2,3 por ciento). 

 Una disputa trascendental. El informe de la UMET concluye con una paradoja, que en la arena de las macro finanzas (dólar), Argentina pelea la batalla de la integración e inclusión social (inflación, poder adquisitivo, pobreza). De esta forma, la nueva ministra Batakis deberá encarrilar la macroeconomía (déficit fiscal y balanza comercial) para que se pueda ordenar la microeconomía (consumo y salarios, por ejemplo).