El ministro de Hacienda, Finanzas y Energía de la Nación, Nicolás Dujovne, comienza su defensa del Presupuesto 2019 en la Cámara de Diputados, con un cambio en el Impuesto a las Ganancias.

Según el proyecto presentado por el Gobierno, la Ley de Leyes contendría una modificación tributaria que, de aprobarse, alcanzaría a un segmento de trabajadores en relación de dependencia y algunos jubilados.

La iniciativa pone en marcha la eliminación de exenciones que afectarían a empleados estatales de los tres niveles, otros con regímenes especiales y una parte de los jubilados.

Diputados: defiende Dujovne el Presupuesto ante la oposición y sepulta la idea de dolarizar la economía

Gastos de representación, movilidad y viáticos serían alcanzados por un impuesto cuya derogación fue promesa de campaña cambiemita a mediados de 2015. En medio de una situación económica "tormentosa", los pesificados reniegan cada vez más respecto a su incumplimiento.

Con el ajuste como mandamiento, el principal objetivo del Presupuesto es alcanzar el equilibrio fiscal. Esta exigencia del Fondo Monetario Internacional es, acaso, un gran obstáculo en un año electoral para el que el oficialismo ya no es tan optimista.

Y aunque Rogelio Frigerio, presionado por la necesidad de enviarle un gesto de unidad a Madamme Lagarde, hizo sus deberes y convenció a la mayoría, no todos los gobernadores suscribieron al plan de ajuste y austeridad que ofrecen desde la Casa Rosada.

Mientras la oposición comenzó a elevar la voz (el Frente Renovador avisó que exigirá cambios) respecto a varios pasajes de un proyecto que conforma a pocos, en la Cámara Baja la negociación es mucho más dura de lo esperado.

Del Senado se espera, en cambio, una actitud mucho más dócil ante el Presupuesto: una vez más, Pichetto y su ejército de dialoguistas, bajo el discurso de ofrecer gobernabilidad, darían luz verde al ajuste tal como acordaron los mandatarios provinciales.