El presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Miguel Ángel Pesce, decidió romper el silencio para dar nuevas definiciones sobre los lineamientos económicos del Gobierno.

En ese sentido, el economista profundizó la posición del Frente de Todos sobre la renegociación de la deuda.  Para Pesce, el default de la deuda soberana es “posible” aunque poco probable, en el marco de las negociaciones que encara el Gobierno argentino con los bonistas, con una fecha límite tentativa para el 31 de marzo próximo.

"Yo le adjudico pocas probabilidades, pero es posible. Estamos en una negociación, el Gobierno va a hacer una oferta, y esa oferta puede ser aceptada o rechazada. Lo que sí, el Gobierno no va aceptar ningún tipo de propuesta que no sea sustentable en el corto y en el largo plazo", anunció.

En la misma línea que Guzmán, el director de la banca pública nacional aseguró que el Gobierno trabaja en pos de una reestructuración sustentable. "Tenemos que tener un perfil de deuda que pueda ser pagado y en eso está trabajando el Gobierno y esa es la oferta que se le va a hacer a los acreedores", expresó. Y agregó que "va a hacer una oferta consistente y hay altas probabilidades de que los acreedores la acepten, pero no depende del Gobierno, si no de la voluntad de terceros. Alguna probabilidad de que haya rechazo de la oferta existe. Esperemos que no suceda".

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Cepo, dólar y la disputa con los bancos

En la entrevista con Luis Novaresio, el egresado de la universidad de Buenos Aires también hizo mención al cepo cambiario y el tipo de cambio. Pesce aseguró que sin las regulaciones cambiarias, la demanda de divisas sería mucho mayor y, por consecuencia, "el tipo de cambio sería más alto".

En ese sentido, descartó la liberación del cepo, al menos para el 2020. "No imagino que se pueda comprar más de 200 dólares", dijo y agregó que "Mientras la Argentina no vuelva a superar los USD 80.000 millones de exportaciones, como ocurrió a principio de la década pasada, vamos a tener este tipo de restricciones, salvo que queramos que el salario real caiga y queramos tener más pobres en la Argentina".

Por último, tal como se venía anticipado, el pasado miércoles el Banco Central resolvió aplicar un tope de 55% a las tasas de las tarjetas de crédito. "La tasa de interés de las tarjetas de crédito estaba en niveles superlativos", indicó y, de paso, volvió a cargar contra la gestión del Central en tiempos que Macri manejaba el Ejecutivo. "El Banco Central llegó a establecer la tasa de referencia en 83%, con vencimientos a tres días. Va en contra de la ética cobrar tasas del 120% efectivo anual. La gestión anterior fue muy mala, desconocieron la realidad".