A Miguel Pesce, al frente del Banco Central, le encargaron una misión central: bajar los intereses financieros, tanto para el consumo como para las PyMEs. La expectativa es que esa reducción tenga su correlación con la inflación.

Con ese objetivo, el economista mantiene reuniones constantes con las cámaras bancarias, tanto locales como multinacionales. Y, desde el propio Banco Central, muestran como un "triunfo" la baja de las tasas de las Leliq -instalada en 44%- que obligó a los bancos a reducir su tasa de ganancia en los préstamos fijos.

Pero Pesce redobló la apuesta, al pretender ahora que los bancos rebajen la tasa de financiación en las tarjetas de crédito. En algunos casos la refinanciación de la tarjeta, por el pago mínimo, llega al 200%. Incluso se baraja desde el Gobierno buscarían imponer una "tasa máxima" para el recargo mensual de los bancos, denominado revolving.

Ahora 12

La otra disputa se da en torno al programa Ahora 12. Se sabe que el plazo de esta política de consumo finaliza el 31 de marzo.

Los bancos dejaron trascender que para mantener el Ahora 12 pretenden que suba la tasa efectiva anual (TEA), que hoy en día es del 20%, al 30%. Con ese sentido se absorbería la pérdida del revolving.

Pero la disputa pareciera estar planteada: el Gobierno incluso quiere que la tasa del Ahora 12 también tenga una reducción para el pago en doce cuotas.