En un giro inesperado de la causa, este miércoles quedó suspendido de forma temporal el juicio que a partir del 3 de abril próximo colocaría en el banquillo de los acusados al futbolista colombiano Sebastián Villa, quien fue acusado de abuso sexual por la joven Tamara Doldán, caso por el que el exdelantero de Boca se enfrenta a una pena de hasta 15 años de prisión.

Según informaron fuentes judiciales, los abogados de ambas partes acordaron utilizar una figura legal denominada "reparación integral de daño", incorporada en el Código Penal en 2015, para evitar el proceso oral y público.

Pero el fiscal Sergio Anauti se opuso, el Tribunal 4 de Lomas de Zamora le dio la razón al representante del ministerio público y entonces ambas partes, querella y defensa, se unieron y apelaron la resolución ante la Cámara, que es la que deberá decidir si es válido y legal el acuerdo al que arribaron victimario y presunta víctima. 

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El exinternacional colombiano, que juega en el fútbol búlgaro, está acusado por el delito de "abuso sexual con acceso carnal".

El episodio ocurrió durante la noche del 26 de junio de 2021, cuando el delantero, junto a otro grupo de futbolistas, se encontraban en una vivienda del Country Venado II, situado en la localidad bonaerense de Canning.

Allí, Villa, que "había consumido mucho alcohol", y Doldán se retiraron a la habitación principal de la casa, en donde el jugador "insultó" a su pareja y luego le pegó "una cachetada en el rostro", según consta en el expediente del caso.

Luego de una fuerte discusión, la víctima, que actualmente tiene 27 años, señaló que el colombiano la encerró en una habitación, abusó sexualmente de ella y la intentó sofocar. Al día siguiente, el entorno del futbolista la habría llamado para ofrecerle dinero a cambio de evitar la denuncia, extremo que la joven no aceptó.

En 2023, el colombiano fue condenado a dos años y un mes de prisión por violencia de género contra su expareja Daniela Cortés. 

Tras aquella sentencia, que de todas formas le permitía mantener su libertad por tratarse de un delito excarcelable, la dirigencia de Boca decidió separarlo del plantel, pese a que el delantero tenía contrato hasta fines de 2024. Sin embargo, en noviembre último Villa viajó a Bulgaria y fichó para jugar en el Beroe de ese país.