No levanta cabeza ni con un cambio de técnico. En Victoria, Tigre goleó este sábado a Boca por 3 a 0 en un partido de la fecha 18 de la Liga Profesional y profundizó el mal momento del equipo de la Ribera, en el que debutó Fernando Gago.

Nehuén Paz, con un gol polémico, abrió la cuenta en el primer tiempo para el Matador, que se defendió como pudo en el complemento y liquidó el pleito en los últimos minutos con tantos de Agustín Cardozo y Sebastián Medina. 

El equipo auriazul fue una oda al desconcierto defensivo en la etapa inicial. Aaron Anselmino y Marcos Rojo no acertaron casi nunca en el anticipo, Ignacio Miramón no hizo pie en el eje del mediocampo y ni Cristian Medina ni Kevin Zenón lograron acercarle con peligro la pelota a los tres delanteros (Brian Aguirre y los uruguayos Edinson Cavani y Miguel Merentiel).

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Con mucha presión e intensidad, y la buena tarea de Gonzalo Maroni, el conjunto local lastimó a su rival cada vez que se lo propuso. Y en una de esas ocasiones llegó el gol, no exento de polémica.

A los 27 minutos, tras un córner, Paz bajó la pelota en el área, remató cayéndose y el disparo, después de pegar en Rojo, se elevó e hizo estéril la estirada de Sergio Romero. Todo Boca reclamó mano del defensor de Tigre y vinculó la jugada con el gol anulado a Milton Giménez ante Argentinos Juniors, pero el VAR, esta vez, consideró que la acción había sido casual.

Con un desvío, y polémica, Nehuén Paz abrió el partido en Victoria (Video: SportsCenter).

"Chiquito" salvó a Boca del segundo gol antes del descanso, después de una entrada solitaria del delantero paraguayo Blas Armoa, a quien el VAR, otra vez protagonista, le anuló el 2 a 0 casi en la jugada siguiente por un milimétrico fuera de juego cuando se disputaba el minuto 45.

El entretiempo pareció revitalizar al conjunto de Gago, que, por momentos, metió contra un arco a un Tigre que se defendió con una gran tarea de su arquero, Felipe Zenobio, ayudado por la imprecisión de Cavani y Merentiel para terminar bien las jugadas de gol que se generaron, sobre todo tras el ingreso de Exequiel Zeballos.

Boca debió alcanzar el empate, pero, entre otras cosas, careció de lo que este sábado le sobró a Tigre: contundencia.

En la primera oportunidad en la que los dirigidos por Sebastián Domínguez cruzaron el mediocampo, Cardozo amplió la diferencia en el marcador, en otra jugada que revisó el VAR, a los 85 minutos.

Jugado totalmente en ataque, el cuadro auriazul volvió a sufrir defensivamente y Medina liquidó el partido para el dueño de casa en el tiempo agregado al reglamentario.