Juan Martín del Potro abrió su corazón y reveló que padece un gran dolor físico debido a las lesiones que tuvo en su rodilla y las sucesivas cirugías sin éxito. "Espero tener un poco de paz en mi pierna y disfrutar algo adentro de una cancha de tenis por última vez", confesó el brillante extenista profesional de cara al partido de exhibición que jugará el 1° de diciembre en el Parque Roca de Buenos Aires, junto a nada menos que Novak Djokovic.

En un video extenso que publicó en sus redes sociales, el tandilense expresó que espera que "al menos por dos o tres horitas" ceda el padecimiento, para poder devolverle a la gente el cariño que le brindó durante todos los años que jugó. "Nunca más pude subir una escalera sin dolor", añadió sobre su "sufrimiento diario".

Las confesiones a corazón abierto de Juan Martín Del Potro a su público.

"La Torre" de Tandil, que deslumbró al país y al mundo con su tenis de elite, declaró en la grabación que difundió en su cuenta de Instagram: "Sería muy bonito poder devolverles desde adentro y junto a Novak (Djokovic) un lindo momento a tanto amor y cariño".

Con 36 años y ya retirado del profesionalismo deportivo, "Delpo" está a pocos días de jugar con el serbio. Por eso, en la previa del encuentro entre los dos colosos, aprovechó el canal directo con sus seguidores para narrar cómo es su vida alejado de la disciplina con la que hizo historia.

"Cuando yo juego el último partido con (Federico) Delbonis, la gente esto no lo supo. Yo nunca lo conté. Al día siguiente me tomé un avión a Suiza y me volví a operar la rodilla. Esa fue mi quinta cirugía".

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El ex número 3 del circuito ATP dio detalles de su padecer actual: "A partir de ahí, nunca más hice públicas mis cirugías. Porque, cuando la conferencia de prensa previa a mi partido con Federico, yo digo ‘Probablemente sea mi último partido’, ahí encontré un poco de paz y corté con algo que me pasaba constantemente que era ‘Delpo, ¿cuándo volvés a jugar? Te voy a ver en un torneo, esto o lo otro’ y yo no podía más del dolor de pierna".

"Entonces ahí dije no, esto lo tengo que hacer perfil bajo, en secreto. Y si llega a funcionar, hago un anuncio que vuelvo realmente. Entonces automáticamente me fui a Suiza. Estuve ahí como dos meses encerrado en un pueblo cerca de Basilea. Me operaron, rehabilitación y no funcionó", relató.

Y continuó, en una serie de revelaciones que permitieron a todos los que lo admiran sentirlo un poco más cerca: "A los dos meses y medio me dicen ‘No, no, nos quedó otra cosita, te vamos a volver a operar’... La sexta. Después de ahí me fui para Estados Unidos. Seguí rehabilitando y entre cirugía y cirugía probaba tratamientos".

Entre las confesiones de su calvario, contó que tiene "más de 100 inyecciones en la pierna y en la cadera y en la espalda": "Me infiltraron, me sacaron, me analizaron, me quemaron nervios, me bloquearon tendones. O sea, un sufrimiento a diario".

Así puso sobre la mesa el astro del tenis nacional que, desde ese partido con Delbonis en febrero de 2022, nunca recuperó la ilusión de que podría volver al tenis profesional. "Realmente no tengo más, más, más ilusión de volver a jugar (profesionalmente) porque el cuerpo no me lo permite", remarcó.

"Después de esa primera cirugía, hasta el día de hoy, nunca más pude subir una escalera sin dolor. He hecho un viaje a Tandil que hago a diario, de cuatro horas, y tengo que frenar en Las Flores, que está a mitad de camino y pararme a estirar las piernas. Me duele muchas veces para dormir. Cuando me giro de lado me despierto porque me pegan unos pinchazos que son muy feos y la verdad que si bien viene siendo como una pesadilla sin final, a diario sigo insistiendo en buscar solución y buscando médicos y alternativas y todavía no la encuentro".

Con rabia, recuerda que "todo empezó en aquella primera cirugía" y que le da "mucha bronca, angustia, impotencia". "Pero bueno, no puedo cambiar el tiempo. Siento que tengo que contarles cómo estoy porque me hace bien. Siempre tuve conexión con el público. Y tal vez este mensaje pueda inspirar o ayudar a otra gente", agregó Del Potro durante el video, que dura más de 11 minutos.

"Yo era un tipo muy activo que le gustaba mucho hacer deporte, no solo jugar al tenis y de repente me invitan a jugar al fútbol y soy el que lleva el mate y se sienta afuera o van a jugar al pádel y hago los videítos y para mí es terrible", concluyó uno de los mejores jugadores en la historia del tenis argentino, ganador del US Open en 2009, de la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Río 2016 y pieza clave en la épica conquista de la Copa Davis ese mismo año.