El anuncio fue histórico por su significado y puede provocar un cambio trascendente hacia el futuro. Por primera vez, los equipos de la NBA realizaron un boicot conjunto a la realización del torneo para visibilizar su respaldo a las protestas contra la violencia policíal y racial.

El puntapié inicial lo dio Milwaukee Bucks, franquicia de la ciudad de Wisconsin, donde el fin de semana la policía atacó de forma brutal, con siete balazos por la espalda, a Jacob Blake, un afrodescendiente que se encontraba desarmado y que quedó paralítico.

El intento de homicidio despertó rápidamente las protestas callejeras y se registraron enfrentamientos con las fuerzas de seguridad con un saldo hasta el momento de dos personas muertas.

Ante esa situación, el equipo de la estrella griega Giannis Antetokounmpo decidió no presentarse al Juego 5 de los Playoff frente a Orlando Magic y hacer valer su apoyo al movimiento Black Lives Matter.

La máxima referencia de la mejor liga de básquetbol del mundo, LeBron James, apoyó el boicot a través de Twitter y la NBA oficializó la suspensión de toda la jornada. Además de Bucks-Magic, fueron cancelados los partidos entre Houston Rockets y Oklahoma City Thunder; y Los Ángeles Lakers (con LeBron)-Portland Trail Blazers.

"Pueden quedarse en la cancha todo lo que quieran, pero los Bucks no saldrán a jugar", sostuvo John Horst, general manager a Milwaukee. "Hoy estamos junto a la NBA, la Asociación de Jugadores, los Bucks y el resto de la liga condenando el fanatismo, la injusticia racial y el injustificable uso de la violencia por parte de la policía contra la gente de raza negra", sentenció Orlando a través de un comunicado.

Además, Boston Celtics y Toronto Raptors analizan no disputar mañana el primer partido de semifinales de la Conferencia Este. "Los jugadores están decepcionados de que vuelva a suceder lo mismo en tan corto tiempo", dijo el entrenador de los Raptors, Nick Nurse. Es que las figuras de la NBA habían pedido como condición esencial para la reanudación de la liga divulgar el lema Black Lives Matter, que luce en el parquet de las tres canchas dispuestas en el complejo Wide World of Sports para los encuentros de los Playoff.

Las protestas en el deporte por la violencia racial

El caso de Blake suma nafta al fuego provocado por la conmoción social que el país experimenta los Estados Unidos desde el asesinato del afroamericano George Floyd el 25 de mayo pasado. La reacción de los ciudadanos dio paso a manifestaciones masivas con pedidos de justicia y también a múltiples disturbios con las distintas policías municipales que se sostienen en forma regular.

Como suele suceder en hechos que impactan en todos los aspectos de la vida cotidiana, figuras del deporte se sumaron al reclamo contra el racismo estructural para aportar a visibilizar esta situación.

Michael Jordan, considerado el mejor basquetbolista de la historia y actor protagónico de The Last Dance, la serie de Netflix que se constituyó como una de las mejores producciones del 2020, dejó una sentencia que no admite discusiones. “Estoy junto a aquellos que gritan por el racismo y la violencia hacia la gente de color de nuestro país. Ya ha sido suficiente”, expresó.

Con el retorno de las competencias de fútbol europeas, distintos futbolistas que convirtieron goles aprovecharon la fugaz fijación de las cámaras para visibilizar su protesta. Fue el caso de la joven estrella del Borussia Dortmund, Jordan Sancho, quien mostró una remera que pedía justicia por el ciudadano afroamericano asesinado.

El plantel del Liverpool, campeón de la Premier League, se fotografió en su totalidad arrodillado y con el puño en alto, en el centro de la cancha, tres días después del crimen de Floyd. Ese reclamo conjunto fue reiterado de forma individual por distintos jugadores en casi todos los partidos de las Ligas y las Copas europeas desde el reinicio de la actividad. Kylian Mbappé, estrella naciente del fútbol mundial, reunió más de 500.000 likes en un tuit en el que pedía justicia.

Quien también dejó su huella con una cadena de mensajes en las redes fue la promisoria tenista Coco Gauff, que con sólo 16 años va camino a adueñarse del tenis femenino en el corto plazo. La chica estadounidense lanzó una campaña para juntar firmas en reivindicación del crimen de su compatriota y hasta posteó un video suyo, encapuchada con un abrigo negro, preguntándose si será la próxima en ser castigada por las fuerzas policiales.

“Lloro cuando miro este video… Todos los días gente inocente muere por nuestro color de piel. Nadie merece morir así. No puedo creer esto, tiene que parar. Prometo usar siempre mi plataforma para que el mundo sea un mejor lugar”, escribió.

El mejor automovilista del mundo, Lewis Hamilton, logró que los pilotos de la Fórmula 1 se arrodillaran con el puño en alto pidiendo justicia, luego de varios intentos y reclamos contra las autoridades.

Boicot en la NBA: motivos, orígenes y consecuencias de una protesta inédita

"No hay ni una señal de nadie en mi industria, que, por supuesto, es dominada por los blancos. Soy una de las únicas personas de color allí, estoy solo. No dijeron nada al respecto. Sólo sé que sé quienes son y los veo", se había quejado el multicampeón británico, que decidió junto a las autoridades de Mercedes cambiar el color gris de los autos por un teñido negro, para condenar la violencia racial.