Las dos claves del conflicto que ¿puede? dejar sin carrera a Paulo Londra
El cantante narró su salida de la productora Big Ligas: "Me sentía burlado por dos que siempre se complotaban para que mi opinión no cuente".
Tras el crecimiento exponencial en la carrera del joven cordobés, los últimos meses no fueron del todo felices para el artista. Sin poder sacar nuevas canciones, Paulo Londra debió enfrentar un grave conflicto con sus productores. Y después de varios mensajes incógnitos en sus redes sociales, que llevaban a entender la difícil situación que atravesaba, el trapero pudo contar la verdad.
Londra, quien hoy tiene más de 15 millones de suscriptores en YouTube, hizo público un comunicado en el que relató paso a paso lo ocurrido y el contexto en el que debió firmar un contrato del cual desconocía su contenido.
Desde fines del año pasado, el artista había publicado varios tuits en su cuenta personal, en los que manifestaba su disconformidad con la productora que manejaba su carrera. Pese a que no llegaba a ser específico con lo ocurrido, era claro su malestar ante la situación.
Según su oficina de prensa, el cantante debió atravesar “una tortuosa desvinculación con su disquera”. Asimismo, señaló que “el proceso ha sido cuesta arriba, y ha mantenido al artista ocupado en este asunto”.
Desde El Canciller exponemos las dos claves para conocer cómo fue la renuncia del cantante a la productora Big Ligas.
La génesis de Big Ligas
En el 2017, tras el lanzamiento de su canción “Luna llena”, fue convocado por los colombianos Cristian Salazar (Kristo) y Daniel Oviedo (Ovy), con quienes formó de forma independiente la productora "Big Ligas".
“Confié en ellos, rechacé otros contratos porque decían que no era lo mejor para mí, estaba entusiasmado, pensé que todo lo mejor posible estaba por venir”, indicó el artista recordando lo sucedido tres años atrás.
“Vamos a crecer tanto independientemente que nos van a admirar”, señaló Londra acerca de sus sentimientos en aquel entonces. Con 19 años y una carrera que iba en ascenso, solo aspiraba a trabajar duro para cumplir su sueño en el mundo de la música.
Amenazas y presiones: el por qué de la desvinculación de Londra
El cordobés confiaba en su equipo. Tanto que en todas sus canciones nombra a “Big Ligas”, y menciona a “Kristo” y “Ovy”, sus managers en aquel entonces.
En el comunicado emitido hoy desde su oficina de prensa, Londra relató cómo fue el compromiso que firmó en Colombia: "Kristo vino con unas fotocopias, una lapicera cara y un filmaker (...) me dijo que firme mientras nos filmaban, pensé que era un simple video y nunca pensé que eso fuese un contrato".
Esa misma noche, “Ovy” le explicó que aquello que había firmado “no valía nada (…) ese papel se podía romper o revisar en cualquier momento”, relató Londra. “De la forma en que me lo dijo, y en el contexto que estaba, no me quedó más que creerle”, agregó.
Al día siguiente, mantuvo una videollamada con los abogados Stephanie Chopurian y Matt Greenberg. “Me explicaron sobre números que nunca entendí, y sobre un contrato que es difícil de entender hasta para un abogado”, indicó el cordobés. “No podía y no quería aceptar que me habían hecho firmar algo sin ver, sin un letrado a mí lado, y sin posibilidad de analizarlo con alguien cercano mío”, puntualizó el artista.
“Seguí y avancé”, manifestó, tras mentalizarse en no querer decepcionar a nadie por mostrar “miedos y disconformidades”: “Quería dejar en claro que puedo”.
Londra siguió cosechando un éxito tras otro, hasta que en noviembre de 2018 llegó Adán y Eva, canción que hoy cuenta con más de 742 millones de reproducciones en YouTube. Tras la resonante popularidad, sus socios le ofrecieron un trato con una disquera. Fue entonces cuando el cordobés comenzó a pensar que eso sería “romper con lo que estábamos haciendo”, es decir, “ser independientes”.
Con el paso del tiempo, el joven recibió una oferta para grabar un álbum, de la que también dudó. Posteriormente, “Kristo” se comunicó con él, y por primera vez le manifestó que tendría “complicaciones” en caso de no aceptar la oferta con Warner Music.
Luego fue el abogado Greenberg quien le envió una carta de intimación a él y a su padre, en la que “decía que me podía perjudicar por todo lo que haga perder a la empresa, y que debía firmar o podía tener graves consecuencias económicas”: “nos mostró la verdadera cara del contrato que firmé con ‘Ovy’ y ‘Kristo’”, señaló el cordobés.
“En ese momento me di cuenta que no éramos un equipo”, sentenció Londra.
Así fue cómo el joven debió aceptar el trato con la discográfica en contra de su voluntad: “No me quedó más que agachar la cabeza por la amenaza”.
Posteriormente, también debió enfrentar conflictos con sus socios por la autoría de sus canciones, sin percibir lo que le correspondía. Además, el joven indicó que siempre quisieron aparecer en sus videos, le decían qué hacer y eran quienes decidían por él: “Fue muy frustrante”.
“Ya estaba cansado, me sentía burlado por dos que siempre se complotaban para que mi opinión no cuente, y tuve que pedir ayuda”, concluyó el artista.
Finalmente, tras varios meses de negociaciones, Paulo Londra logró desvincularse de la discográfica que lo representaba.