La familia del jugador William Tapón, quien se suicidó días después de agredir al árbitro Cristian Ariel Paniagua, responsabilizó al referí por la muerte del joven.   

Paniagua quería que Tapón le diera "300 mil pesos" para que no lo denunciara, según una conversación filtrada por el entorno del futbolista en distintos medios televisivos.

"Yo te entiendo, entiendo porque yo también estuve del lado de los jugadores, pero jamás les falté el respeto de querer ir a pegar. Vuelvo a repetir, me podría haber matado", se escucha en uno de los audios.   

En otro, el árbitro remarcó que le llegaban mensajes que lo alentaban a "hacer la denuncia" y "arruinar" a Tapón por la patada en la cabeza que le pegó el sábado pasado: “Yo la verdad que no quiero eso. Quiero arreglar algo con el pibe y que se termine todo esto”.   

Tweet de ElCanciller.com

En la comunicación, Paniagua sostuvo que quería terminar el asunto ya que se estaba "rompiendo la cabeza" por unas deudas pendientes.   

"A mí también me está rompiendo la cabeza, tengo unas cuentas que pagar y no pude por esa boludez que se mandó. Necesitaba esa guita, por algo fui a laburar doble turno y al final salió todo mal", afirmó en aparente referencia a los partidos del torneo que dirigió ese sábado.

En otro trayecto del audio, se lo escucha decir: "No es culpa tuya ni del equipo, es culpa de él. Yo le doy hasta la tarde para que se comunique conmigo, si no tarde o noche voy a tener que ir a hacer la denuncia. Me está apurando el abogado".    

Marisol, Marcelo, ambos hermanos de Tapón, y Agustina, la pareja de la víctima, acusaron directamente a Paniagua de querer chantajear al jugador para que no lo denunciara.