La investigación por la desaparición de Yésica Cuevas, una mujer de 42 años supuestamente embarazada de trillizos que fue vista por última vez el pasado 29 de enero en el partido bonaerense de Berazategui, arrojó en las últimas horas datos importantes que incluyen llamativas búsquedas en su teléfono celular y movimientos de su tarjeta SUBE.

La mujer había asegurado que el día en el que se ausentó de su hogar tenía un parto programado en el hospital Evita de esa zona, pero desde el centro de salud lo desmintieron, a la vez que advirtieron que no poseía una historia clínica. Horas antes, ella había insistido en ir a comprar un medicamento a la farmacia para su hija menor Zoe, según reveló su mamá, Margarita, quien relató que antes de entregar el celular de Cuevas a la Policía lo revisó y encontró búsquedas de ecografías de embarazadas. 

En relación a las cámaras de seguridad, la Justicia tiene una filmación en la que se ve a alguien físicamente igual a la mujer desaparecida, y con ropa similar a la que llevaba ese lunes 29 de enero (una remera blanca con un pantalón o calza negra). La persona registrada en las cámaras llevaba una bolsa de nylon en la mano.

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En la grabación, se ve que se sube a una unidad de la línea 98, que tiene como destino final la Plaza Once en Capital Federal. A su vez, una testigo relató que "la chica que estaban buscando subió en el mismo colectivo" que ella esa mañana. Además, su tarjeta SUBE tuvo movimientos en los días posteriores a la desaparición, aunque resta comprobar que sea efectivamente ella misma quien la haya usado.

Su pareja, Eduardo Javier Balmaceda, afirmó que Cuevas esperaba trillizos, pero al declarar ante la Justicia explicó que nunca dejó que él ni nadie la acompañaran a hacerse los estudios. Al respecto, detalló que le pedía que esperara en la calle y cuando salía solo indicaba que estaba todo bien. Sin embargo, la única entrada que registró en el hospital mencionado fue por una quemadura que sufrió en un brazo.

A mediados de octubre, la mujer ahora intensamente buscada denunció a Balmaceda en la Comisaría de la Mujer de Berazategui, en donde declaró sobre un caso de violencia por parte de su pareja y afirmó que estaba embarazada, pero no de trillizos, sino de mellizos.

Si bien para la familia su contextura física y la forma de su panza era la de una persona en un avanzado período de gestación, un obstetra que la atendió y que declaró el viernes en fiscalía señaló que "nunca" pudo comprobar que estuviera embarazada.

El médico aseguró que, a finales de 2023, examinó a Cuevas en dos oportunidades en un centro asistencial del barrio del sur del Conurbano y, según revelaron fuentes judiciales, el especialista señaló en su declaración que la mujer insistía en que coloque en cualquier acta médica que ella estaba gestando.

En la primera visita, le dijo que estaba embarazada y con pérdidas, por lo que el obstetra le pidió una ecografía, pero nunca se la hizo. En el segundo encuentro, fue por una supuesta infección urinaria y para ver el estado de su gestación, pero el especialista le recordó que no podía saberlo sin una ecografía. "Usted escriba que yo estoy embarazada, que eso me va a ayudar a mí con mi pareja", le pidió ella, según declaró el hombre a la Justicia.

Cuevas tiene el pelo largo lacio y castaño, es de tez morena clara, de contextura robusta, mide 1,60 metros y tiene ojos marrones. Al momento de su desaparición vestía pantalón largo color negro tipo Oxford y remera blanca lisa. La causa por esta misteriosa desaparición fue caratulada como "averiguación de paradero" e interviene la Unidad Fiscal N° 2 de Berazategui.