Las personas que superan una enfermedad desarrollan anticuerpos (células defensivas) presentes en su sangre, que permiten inmunidad. El Ministerio de Salud nacional activó el Plan estratégico para regular el uso de plasma de pacientes recuperados de coronavirus. Se hará un ensayo clínico experimental para conseguir un medicamento, que utilizarán quienes se encuentren infectados.

En ese contexto, la Red de Bancos de Sangre públicos y privados de todo el país convoca a quienes se hayan curado del COVID-19 y cumplan los requisitos para donar. La Fundación Hemocentro es uno de los centros habilitados, y su director médico Roberto Fernández explica en qué consiste el procedimiento y los beneficios del mismo.

¿En qué se basa el plan de recolección de plasma?

Parte de una resolución del Ministerio de Salud nacional ya que se busca hacer un trabajo de investigación, dado que aún no está demostrado que el plasma tenga un efecto beneficioso en los casos de COVID-19. La base se fundamenta en el método utilizado en otras epidemias, y en el país especialmente con el tratamiento de la Fiebre Hemorrágica Argentina. En ese caso, desde la década del ´70, se utilizó el plasma de convalecientes como único tratamiento prácticamente. En base a estos antecedentes y a la poca posibilidad de un tratamiento efectivo, se decidió usar el plasma de los convalecientes porque contiene los anticuerpos de las personas que se han curado. Pensamos que puede ser beneficioso para los infectados.

¿Tiene distintas etapas el proyecto?

El ministerio determinó un trabajo que tiene tres ramas. Una es enviar el plasma de convalecientes al Laboratorio de Hemoderivados de la Universidad Nacional de Córdoba. Allí tienen un plan de elaboración de una inmunoglobulina específica (mide la concentración de distintos tipos de anticuerpos en la sangre) para lograr un medicamento. También se desarrollarán los reactivos de medición de anticuerpos neutralizantes, y por último se prevé recolectar plasma para transfundir a los infectados en el marco de un estudio experimental.

¿Hay un plazo para el estudio?

Esto recién empieza y no se estableció una fecha. Se acaban de designar los centros de recolección públicos y privados. Estamos viendo cómo se va a financiar, hasta el momento no tenemos directivas sobre la cuestión.

Coronavirus: en qué consiste la donación de plasma de pacientes recuperados

¿Ya se probó en algún paciente en el país?

El CEMIC lo hizo en un paciente internado en el Sanatorio Güemes, aparentemente con buenos resultados. Más experiencias no hay en Argentina aunque este método se está utilizando en algunos países del mundo. De a poco comienzan a aparecer papers sobre el tema, donde se mencionan los distintos niveles de éxito en su uso. En la fundación tenemos requerimiento de varias terapias intensivas de clínicas privadas que quieren probar esta alternativa.

Al usarse este plan, ¿el paciente debe prestar su consentimiento para que le transfundan el plasma?

Es imprescindible en un estudio experimental contar con el consentimiento informado del donante y del paciente que lo va a recibir.

¿En qué estadio de la enfermedad la transfusión tiene mejores resultados?

Unos dicen que tiene mejor resultado cuando la enfermedad todavía no avanzó mucho. En cambio, otros lo utilizan como un método compasivo, que se usa cuando el estado de salud del paciente se agrava y no hay muchas alternativas, entonces se prueba esto.

¿Cuáles son las pautas para poder ser donante?

Las condiciones mínimas establecen que el donante debió ser enfermo de COVID-19, debió pasar 14 días desde el alta (dado que se puede tener la certeza de que el virus desapareció) y tener dos pruebas negativas de PCR. Aparte de reunir las condiciones requeridas para un donante de sangre común.

¿Cómo funciona el anticuerpo de alguien recuperado en otro infectado?

A nivel general, la persona se cura cuando desarrolla en su sistema inmune la lucha contra el virus, no solo hay anticuerpos sino células inmunocompetentes que atacan al virus. Pero en el caso del COVID-19 tendríamos solo los anticuerpos, que de ser efectivos serían suficientes para erradicar la enfermedad. Es decir que son anticuerpos antivirales y de ellos se quiere aprovechar esta propuesta.

¿Cuántos centros están autorizados para recolectar plasma?

A nivel privado hay solo dos: el nuestro en Capital y otro que trabaja más en la Provincia de Buenos Aires. También en el Conurbano hay varios hospitales que implementarán la recolección como El Cruce de Florencio Varela y el Hospital Durand, entre otros. En total son seis.

¿Se podrá utilizar el plasma de un donante adulto en un niño?

Si hay un protocolo de investigación para ser aplicado a niños, se podrá realizar la transfusión.

¿Qué cuidados especiales hay ante un donante convaleciente?

Son donantes especiales, por eso sus casos se estudian antes de la donación. También se hace un cita previa con ellos y tienen un protocolo distinto al donante habitual.

Más allá del COVID-19, hay una caída en la donación de sangre desde que comenzó la cuarentena, ¿cómo está la situación hoy?

Esto es lo que más nos preocupa porque todavía no se recuperó el stock. Cayó muchísimo, y realmente esto del confinamiento conspira con la posibilidad de mejorar esta situación. La sangre salva vidas y no hay modo de reemplazarla. Al cancelarse cirugías programadas se alivió un poco la necesidad de sangre. Pero todavía hay muchos pacientes que la requieren, sobre todo de plaquetas, y nos enfrentamos a un problema. Todos los días estamos bajo presión, luchando con este faltante.

¿Las campañas de concientización ayudaron a paliar un poco la situación?

Si aparece en los medios hay respuesta de la gente, pero después vuelve a caer, y esto se prolonga en el tiempo y estamos cada vez peor. Se necesita recordar durante toda la cuarentena que se puede circular para ir a donar. Hay que pedir el turno previamente, y con el turno asignado se puede salir. La solidaridad está, cuando la gente recibe el mensaje concurre. Esto requiere de información constante para que salgan a donar.

¿Quiénes no pueden donar sangre?

Casos sintomáticos que cumplan con los criterios del caso sospechoso; asintomáticos que tengan un historial de viaje en los últimos 14 días al exterior del país (no aptos para la donación por 30 días después de regresar); las personas que tuvieron contacto con personas que tengan un historial de viaje en los últimos 14 días al exterior del país (no aptos para donar por 30 días después del último contacto con estas personas) y los infectados con coronavirus. Estos últimos no pueden donar por 90 días después de la recuperación (asintomática y sin secuela).