Natalia Melmann tenía 15 años cuando fue secuestrada, abusada y asesinada por un grupo de policías en Miramar. Era febrero de 2001, en plena temporada estival. La ciudad quedó conmocionada. 17 años después, en los tribunales de Mar del Plata se vivió algo parecido: un policía fue absuelto ayer por el caso aunque la fiscalía y la familia de Natalia consideraban que contaban con las pruebas suficientes como para condenarlo.

Ricardo Panadero era sargento. Había sido involucrado en la causa, pero, a diferencia de los tres policías condenados en 2002 a perpetua, fue desvinculado antes de que llegue a juicio. La familia de la víctima se opuso y en 2014 un fallo de la Suprema Corte de Buenos Aires permitió que su caso llegue a debate.

Natalia Melmann tenía 15 años cuando fue secuestrada, abusada y asesinada por un grupo de policías en Miramar en febrero de 2001.

El resultado de ADN de un vello púbico masculino y el relato de algunos testigos eran los pilares de la acusación de la fiscalía y la querella. Para los jueces Jorge Peralta, Fabián Riquert y Juan Manuel Sueyro no alcanzaron para condenar a Panadero. Según lo que dijeron ayer, se basaron en el testimonio de una especialista en genética que no pudo precisar cual era la probabilidad de que este vello encontrado fuera del acusado.

Afuera de los tribunales, después de la absolución, hubo protestas. Ante esa situación, la policía disparó con balas de goma a los que se manifestaban en repudio al fallo. En medio de esta situación, la familia de Natalia adelantó que irá a la Casación para que este fallo se revierta y se condene a Panadero por el secuestro, abuso y homicidio.

Caso Natalia Melmann: absuelve la Justicia a uno de los policías imputados

El caso

Ricardo Suárez, Oscar Echenique y Ricardo Anselmini fueron condenados en octubre de 2002 por la privación ilegítima de la libertad, el abuso sexual agravado y el homicidio agravado por ensañamiento, alevosía y por haber sido cometido por dos o más personas. En ese juicio, se develó la brutalidad con la que habían tratado a Natalia, a quién secuestraron para que sea el "regalo" de las "fiestitas" que hacían en una casa del barrio Copacabana, en las afueras de Miramar.

Natalia había salido a bailar. Nunca volvió. Su familia hizo la denuncia, la buscaron y organizaron marchas. Cuatro días después, su cuerpo apareció en el vivero municipal. No sólo había sido torturada física y sexualmente sino que la estrangularon con el cordón de una de sus zapatillas. En esa escena, se encontraron cinco perfiles genéticos diferentes. Hay uno que nunca se supo a quién perteneció.

Ricardo Suárez, Oscar Echenique y Ricardo Anselmini secuestraron a Natalia para que sea el "regalo" de las "fiestitas". Fue torturada, abusada y estrnagulada con el cordón de una de sus zapatillas.

Reclusión perpetua tuvieron los tres policías pero el año pasado les permitieron tener salidas transitorias. Dos veces por mes van a sus casas. Caminan como si nada hubiese ocurrido aunque uno de ellos vive a solo un par de cuadras de la mamá de Natalia. El recurso que presentó la familia contra las salidas transitorias también lo tiene que resolver la Casación, que no tiene tiempo para concretar un fallo.

"Solo cuando todos estén presos, Natalia descansará en paz", dijo la mamá de Natalia cuando salieron las perpetuas contra los tres policías. 17 años después, Laura Calampuca todavía no sabe cuando sucederá.