El 2017 fue el año de los créditos hipotecarios. La modalidad UVA (Unidad de Valor Adquisitivo) permitió a miles de familias acercarse a lo que muchas veces no llegaba a ser un sueño: tener una vivienda propia.

Sólo en la provincia de Buenos Aires, a través del Banco Provincia, se entregaron cerca de 11.000 créditos. El dato que muestra la accesibilidad de la propuesta es que la mayoría de los beneficiarios son docentes, empleados públicos, municipales, judiciales y policías. Además, se hace fuerte la presencia de los jóvenes; el 30% de los que lograron acceder tienen entre 18 y 34 años, mientras que el 57% tiene entre 35 y 50 años.

Las plazas en las que mayor cantidad de hipotecas se registraron son La Plata, Mar del Plata y la Ciudad de Buenos Aires. En promedio, el 50% de los acreditados tomó $1.5 millón a 23 años, aportando una cuota mensual aproximada de $11 mil.

Además, la entidad planea lanzar una línea de créditos UVA para desarrolladores, en la que el banco financiará un 60% de la construcción, y otra para quienes desean financiar la compra de departamentos desde el pozo.

Juan Curutchet, presidente de Bapro vaticinó que “mientras 2017 fue el año de la expansión, ahora llega la etapa de la consolidación del crédito hipotecario”. Según su análisis, “las familias adoptaron la modalidad UVA de forma natural porque fue la llave para acceder a la casa propia después de muchos años donde les resultaba imposible”.