La tercera ola de coronavirus va dejando cada vez más infectados en la sociedad y más preocupaciones en el gobierno. En la última semana se registaron picos de más de 100.000 casos por día lo cual obliga a las autoridades nacionales a tomar y reforzar medidas sanitarias. 

Durante la jornada de ayer, la ministra Carla Vizzotti tuvo un encuentro formal con representantes la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) para evaluar la situación de los menores de edad; ya que, si bien el aumento de casos es considerable en todas las franjas etarias, el virus afecta mucho más a aquella porción de la población que no fue vacunada. Actualmente, los niños y adolescentes representan el grupo con más riesgo, por tener la menor cobertura de aplicaciones. 

En la franja etaria que se compone de casi seis millones de niños de 3 a 11 años, los vacunados con dos dosis alcanzan el 43,3%, mientras que el 66,7% cuenta con una sola inoculación. Es decir, más de la mitad de los niños (56,7%) aún no tiene el esquema completo, y el 33,3% aún no tiene ni una sola dosis.

Las cifras son un poco más alentadoras con los adolescentes: el 64,7% de las personas entre 12 y 17 años goza del esquema completo, mientras que el 83,8% recibió por lo menos una dosis. De esta forma, sólo hay un 16,3% de adolescentes sin iniciar su esquema. 

Por su parte, desde la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) consideran que la vacunación en menores es muy importante por diversas razones, entre las cuales destacan la protección segura y eficaz contra cuadros graves de coronavirus; la contribución a la inmunidad de rebaño y a la prevención del surgimiento de nuevas variantes, como también el fortalecimiento de la sociabilidad y la reducción de los temores al momento de volver a las aulas.