La Unión Cívica Radical (UCR) llevó a cabo sus elecciones internas en la provincia de Buenos Aires este domingo y la lista encabezada por Miguel Fernández se alzó con la victoria con un ajustado 52% de los votos sobre Pablo Domenichini, que obtuvo el 48%.

La lista ganadora de "Unidad Radical" contó con el apoyo del senador Maximiliano Abad y Gustavo Posse y se enfrentó a la opositora "Futuro Radical", que tenía respaldo del presidente del partido centenario, Martín Lousteau, así como de Facundo Manes y Emiliano Yacobitti, entre otros.

Los comicios registraron una participación de 75.797 votantes, sobre un padrón total de afiliados de aproximadamente 600.000 personas. El ganador se quedó con 39.119 de los sufragios.

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El resultado de las internas radicales en la provincia de Buenos Aires es importante para el armado nacional de cara al 2025.
El resultado de las internas radicales en la provincia de Buenos Aires es importante para el armado nacional de cara al 2025.

La movilización fue menor a la esperada, en una jornada en la que faltó competencia en varios distritos, ya que en 102 de las jurisdicciones provinciales se acordaron listas únicas, lo que limitó la participación de los votantes.

El triunfo de "Unidad Radical" en la interna representa un respaldo importante para Abad y su estrategia de mantener el control del radicalismo bonaerense y alejarlo de las influencias de los dirigentes porteños como Lousteau y sus aliados, quienes resultaron los perdedores de la fecha.

En sus declaraciones, Fernández enfatizó la necesidad de que el radicalismo provincial conserve su autonomía y no se convierta en una "dependencia manejada a control remoto desde (la ciudad de) Buenos Aires".

Durante la campaña, las tensiones habían aumentado tras fracasar los intentos de formar una lista de unidad en todo el territorio provincial. El sector finalmente triunfador acusó a sus oponentes de actuar de forma intransigente y de crear una disputa innecesaria en un momento delicado para el país.

Por su parte, "Futuro Radical" buscaba un cambio de liderazgo y la construcción de una nueva dirección para el partido, con la vista puesta en las elecciones generales de 2025.

Los resultados oficiales aún deben ser confirmados por la Junta del partido, pero la diferencia obtenida parece difícil de revertir. Este resultado no solo influirá en el manejo del Comité de la UCR de la provincia de Buenos Aires, sino que tendrá además un impacto clave en la estrategia electoral a nivel nacional, de cara a las legislativas del año entrante.