Tanto los especialistas en economía como el propio Presidente reconocieron que este lunes negro tendrá un impacto directo en la inflación en el corto y mediano plazo. De todas maneras, considerando el plano electoral, el oficialismo comenzó a estudiar qué medidas paliativas tomará para alivianar la situación de las clases bajas y medias de cara al 27 de octubre.

Para paliar las consecuencias de esta reacción de los mercados y evitar una nueva escalada en el precio de la moneda, el Gobierno buscará financiarse con ayuda del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. “Macri autorizó a sus funcionarios a reanudar las conversaciones con la Reserva Federal de EEUU con el objetivo de abrir una nueva línea de crédito que actúe como respaldo hasta el fin de su mandato en diciembre”, reveló Bonelli.

Aún no hubo comunicaciones oficiales en este sentido. Hace algunas semanas, luego de un llamado telefónico con Trump, el presidente le dijo a sus allegados que el primer mandatario norteamericano lo ayudará en caso de complicaciones económicas. Apurado por revertir la situación luego de las PASO, parece que en la Casa Rosada optaron por utilizar esta carta.