En una extensa entrevista televisiva, Javier Milei profundizó este miércoles sus notorias diferencias con Victoria Villarruel, al señalar que la Vicepresidente resolvió "hace mucho tiempo no participar en las reuniones de Gabinete" y "no tiene injerencia" en la toma de decisiones del Gobierno.

El mandatario sostuvo que la titular del Senado "está cerca del círculo rojo",  la incluyó dentro de lo que el oficialismo denomina "casta" y aseguró que "el diálogo entre ambos es meramente institucional". "Es lo que se necesita para cumplir nuestros roles", comentó a La Nación+.

En otro tramo de la nota, el libertario se refirió al reciente desplazamiento de Diana Mondino como ministra de Relaciones Exteriores e indicó que tardó "30 minutos en echarla".

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"Busqué toda la información y la eché", recordó al aludir al voto en contra del bloqueo a Cuba hecho por Mondino en la ONU, que motivó su inmediato reemplazo por Gerardo Werthein, exembajador argentino en Estados Unidos.

En ese sentido, el jefe de Estado explicó que sus ministros "tienen libertad de acción dentro de sus ideas, pero ninguno de ellos tiene permitido un milímetro de error". Como ejemplo, trajo a colación el cese de Nicolás Posse como jefe de Gabinete a finales de mayo pasado. "Eché a un amigo que tenía desde hace 18 años. O laburás bien, o pista", advirtió. 

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Durante la entrevista, de 66 minutos de duración, Milei renovó sus cuestionamiento al periodismo, al señalar que, si bien considera que es "una de las actividades más nobles", la estrella debe ser la noticia "y no los periodistas que se creen dioses".

"A gran parte del periodismo le gusta el boxeo de alta violencia. Y al contrario lo quiere atado de pies y manos. La gente ha sido muy golpeada. Hoy ese rival está fortalecido por ser golpeado brutalmente. La plataforma de Elon Musk (por X) le dio voz a los que no la tenían. Las redes sociales formaron a gente más resistente. Los periodistas tenían el monopolio de la opinión y aprovechaban para ensuciarte. Hoy el sistema es llano. Se tienen que bancar la vuelta", añadió.

Tras indicar que fue víctima de "la campaña más sucia de la historia" y que llegó a la Presidencia "pese a los medios", Milei subrayó que no le molestan las críticas, "sino la mentira".

El Presidente volvió a valorar los logros económicos de su gestión, que todavía no cumplió un año, y reiteró que el peronismo le dejó plantada una bomba "para que explotara en diciembre de 2023" con el objetivo de regresar "al poder en enero" de 2024.

Sin embargo, aseguró que el Gobierno libertario obtuvo los resultados esperados "en seis meses", tras hacer "un ajuste fiscal del 15% del PBI" que "jamás se vio en el mundo". "El FMI no creyó que pudiéramos llevarlo a cabo. Hoy en el exterior reconocen nuestros logros de manera impresionante. Estamos ganando por la goleada más grande de la historia de la humanidad", se jactó.

Milei adelantó que la Casa Rosada está analizando si pedir un préstamo al Fondo o acudir a los mercados para blindar la salida del cepo cambiario. "Lo haremos cuando estén dadas las condiciones", insistió.

"Estamos haciendo el mejor Gobierno de la historia, superando al de Carlos Menem. Argentina entró en el sendero más virtuoso" que jamás haya tenido, concluyó.