A pocos días de las primarias, aunque sin anuncio oficial por la veda electoral, el Gobierno confirmó la suba del 12,22% en jubilaciones (uno de los sectores más afines del macrismo), pensiones y asignaciones que regirá a partir de septiembre de este año.

El aumento del haber jubilatorio, que estaba establecido por la fórmula de movilidad aprobada en 2017, llega como un respiro para estos sectores en medio de un contexto inflacionario. De manera anual, las subas alcanzarán casi un 39% y superará la inflación estimada en un 31% (por el Relevamiento de Expectativas de Mercado). 

De este modo, la jubilación mínima llegará a $12.937,22 y el máximo, de $94.780,42; la Pensión Universal será de $10.349,78 y el máximo quedará en $94.780,42.

Los ocho puntos de diferencia forman parte de la recuperación de los puntos perdidos el año pasado: durante 2018, los jubilados, pensionados y beneficiarios de las asignaciones perdieron casi un 19% del poder adquisitivo.  Mientras que los haberes alcanzaron un incremento del 28,8%, la inflación finalizó en 47,6%. 

El titular de la ANSES, Emilio Basavilbaso, aprovechó que la normativa electoral no incluye a las redes sociales y publicó: "En 2015 decían que íbamos a cortar la Asignación Universal por Hijo (AUH) y no sólo no la cortamos, sino que la mejoramos, y salimos a buscar a más de 1.5 millones de chicos que no tenían datos".

Con los jubilados como foco durante la campaña proselitista, el Gobierno resaltó la Ley de Reparación Histórica y los créditos ANSeS. Además de la suba confirmada en el Boletín Oficial, este miércoles María Eugenia Vidal encabezará un acto con jubilados, en Quilmes.