Después de un reñido y controvertido escrutinio, la Junta Electoral bonaerense proclamó este jueves ganador de los comicios para intendente de La Plata a Julio Alak, tras desestimar el pedido de apertura de la totalidad de las urnas de las elecciones del pasado 22 de octubre efectuado por el actual jefe comunal, Julio Garro, quien denunció “irregularidades” y anticipó que apelará la decisión. 

El anuncio del ganador fue hecho cerca de la medianoche por la Junta Electoral, integrada por el juez federal de La Plata Alejo Ramos Padilla; el presidente de la Suprema Corte bonaerense, Sergio Torres, y el titular de la Cámara Federal de Apelaciones, Roberto Lemos Arias, que avaló el triunfo del candidato de Unión por la Patria por unos 500 votos de diferencia y, más tarde en un comunicado, rechazó “por extemporánea” la solicitud de Juntos por el Cambio para que se reabrieran las 1.806 urnas de los comicios, con el argumento de que el 63% de las revisadas este jueves presentaban “irregularidades”.

“El plazo para pedir la apertura expiró el martes a las 18. El sistema electoral tiene tiempos muy rígidos para resolver los procesos”, señaló la Junta Electoral.

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La demorada definición de la elección del intendente de La Plata mantuvo en suspenso a los 800.000 habitantes de la capital bonaerense desde el día de los comicios, después de los cuales Garro y Alak se proclamaron vencedores e incluso el actual ministro de Justicia provincial fue felicitado públicamente por el reelecto gobernador, Axel Kicillof, y por el Presidente Alberto Fernández.

No obstante, el jefe comunal, que buscaba ser reelegido, aseguró posteriormente que “con el 97,58% de las mesas escrutadas” estaba “747 votos arriba” de Alak, quien el pasado lunes afirmó, a su vez, que se había impuesto en los comicios “por más de 890 sufragios”.

El miércoles, al acceder a un pedido de Garro, la Junta Electoral ordenó que este jueves fueran reabiertas 79 urnas que habían sido observadas por “inconsistencias en el conteo”, según sostuvo el intendente en ejercicio.

Antes de que concluyera esta revisión, Alak volvió a proclamarse “claro ganador” de la Intendencia de La Plata, criticó a Garro por “no reconocer la derrota” y consideró que a Juntos por el Cambio "le cuesta asumir la realidad". 

“Soy el intendente electo de La Plata, con una diferencia de entre 900 y 1.000 votos”, declaró el funcionario a FM Futurock.

Quien ya fuera jefe comunal de la capital provincial entre 1991 y 2007 subrayó que “hay una negativa a asumir la realidad en las filas del PRO", al señalar que la ciudad era “muy importante” para esa fuerza política, integrante de Juntos por el Cambio. “No admiten perder”, remarcó.

"Este jueves se escrutaron 79 urnas observadas y su resultado no arrojó ninguna modificación sustancial respecto de los números que se habían expresado durante el escrutinio provisorio", definió la Junta.

Además, hizo mención a que se encontraron dos urnas que tenían los sobres en su interior, pero sin las boletas dentro. No obstante, destacó que "sí estaban las actas correspondientes, firmadas por las autoridades de mesa y por todos los fiscales partidarios, sin ningún tipo de observación, enmienda ni tachadura".

La reacción de Juntos por el Cambio no se hizo esperar. "Ante el rechazo infundado de la Junta Electoral, Julio Garro y nuestra fuerza política apelaremos pidiendo la apertura de todas las urnas en las instancias respectivas, ya que quedó claro la presencia de irregularidades sistemáticas que desvirtúan la voluntad de los platenses", indicaron fuentes de la coalición en la madrugada del viernes.

“Es nuestro compromiso y el del intendente no parar hasta que el 10 de diciembre asuma quien fue elegido por todos los platenses”, manifestaron.

La decisión será apelada ante la Cámara Nacional Electoral, en un trámite que se estima complejo y con escasas posibilidades de prosperar, dado que no hay muchos casos similares en los que el tribunal superior altere lo dispuesto por la Junta Electoral.