A través del Decreto 21/2025 firmado por Javier Milei y Patricia Bullrich, y aduciendo razones de seguridad nacional, el Gobierno declaró secreta la adquisición de un sistema antidrones para equiparse frente a posibles amenazas que representan los Vehículos Aéreos No Tripulados (VANT).

Así, la medida publicada en el Boletín Oficial permitirá mitigar los riesgos asociados al uso indebido de estos aparatos, como pueden ser envíos ilegales a unidades penitenciarias y hasta intentos de fuga mediante explosivos o ataques. En el texto se hizo énfasis en la sencillez que representa actualmente la adquisición de uno de estos objetos y al "amplio alcance, facilidad de traslado y simplicidad de uso" de los mismos.

Respecto al carácter reservado de las compras por parte del Ejecutivo nacional, el Ministerio liderado por Bullrich expuso como argumento que los drones podrían ser utilizados para "atentar contra la libertad, la vida y el patrimonio de los ciudadanos", así como contra objetivos estratégicos clave.

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"Con el fin de evitar que se conozcan los dispositivos y la tecnología que se pretende adquirir y, a tales efectos, se recurra a otras existentes en el mercado para eludir el correcto funcionamiento de los sistemas que se pretenden adquirir, el Ministerio de Seguridad considera necesario sustanciar la contratación pertinente en los términos del artículo 25, inciso d) apartado 6 del Decreto N° 1023/01", explayaron en el documento.

La mencionada norma se refiere a la "facultad excepcional e indelegable" de "contratación directa" cuando el Poder Ejecutivo Nacional haya declarado secreta la operación "por razones de seguridad o defensa nacional".

La decisión también incluye la intervención del servicio jurídico de la cartera dirigida por Bullrich, para garantizar que la adquisición cumpla con las disposiciones legales correspondientes.

También enfatizaron en la necesidad de capacitar a los efectivos de la Policía Federal Argentina, de la Seguridad Aeroportuaria, Gendarmería Nacional y Prefectura Naval.

La medida llegó luego de un confuso episodio que se vivió a fines de diciembre en el Congreso de la Nación, en donde una pareja de ciudadanos rusos se acercó al edificio a pedir la devolución de un dron marca DJI, modelo MAVIC minio PRO4, que se les había perdido.