La derrota que sufrió ayer el PRO en La Pampa puso en evidencia lo que las encuestas de Jaime Durán Barba ya advertían desde principios de este año: Mauricio Macri no mide bien en el interior y sus candidatos más cercanos podrían sentir el impacto de esa imagen negativa, no solo en las internas sino también en las generales.

En el radicalismo tomaron nota del efecto negativo de Macri y decidieron avanzar con su estrategia. El gobernador de Mendoza y presidente del Comité Nacional del partido, Alfredo Cornejo, primero adelantó las elecciones en su provincia y eligió a un candidato propio para sucederlo. Luego, en un doble juego, intervino la UCR de Santa Fe y la obligó a sumarse a la alianza Cambiemos, una decisión que a la vez fortaleció a su candidato en ese distrito, José Corral, y lo dejó como favorito para pelear por la gobernación.

Interviene Cornejo la UCR de Santa Fe y le da a Macri el frente Cambiemos en el distrito

El ya ex precandidato a gobernador de La Pampa, Carlos Mac Allister, lo había advertido antes de conocerse el resultado de los comicios de ayer. "Los que estamos más cerca de Macri podemos tener una situación un poquito más complicada", admitió el exjugador de Boca, que luego aclaró que es algo momentáneo y remarcó que la imagen del presidente "va a ir subiendo cada día" hasta octubre.

En Cambiemos saben que se están jugando un pleno: si la economía no se recupera (los números del primer trimestre no son alentadores), la imagen del mandatario seguirá cayendo. El análisis de las encuestas de Durán Barba refleja también que el voto "duro" macrista es bastante inferior a la intención de voto que hoy tiene Macri. Es decir, que podría perderse con facilidad. Por eso necesitan reforzar la polarización con la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Con la economía en la trastienda, planea Durán Barba una "campaña corta" con eje en Cristina

Hoy, sin ir más lejos, lo confirmó el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, uno de los encargados de la estrategia electoral del oficialismo este año. "Cristina es, por lejos, la que más intención de votos de la oposición tiene. No entiendo por qué no se presentaría".

Aunque la senadora y líder de Unidad Ciudadana todavía no confirmó si competirá en las elecciones de agosto y octubre, la mayoría de las encuestas la ubican primera en intención de voto en la primera vuelta, aunque en el ballotage por ahora se mantiene un empate técnico: en algunas galla ella y en otras Macri, pero siempre con diferencias mínimas y con un alto porcentaje de indecisos.