Una semana después de haber encabezado la tradicional cena de camaradería de las Fuerzas Armadas, Mauricio Macri modificó la reglamentación electoral y habilitó a los efectivos de seguridad que tengan que custodiar mesas lejos de sus hogares a votar en aquellos establecimientos, en un intento por sumar votos en las PASO y contrarrestar la diferencia con Alberto Fernández, la que estaría en torno a 4 y 6 puntos porcentuales, según consignan las encuestas. 

Son aproximadamente 52.000 sufragios de los que el Gobierno nacional espera sacar rédito. El llamado Voto Comando les permitirá sufragar a los efectivos del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea, así como a policías, gendarmes e integrantes de la Prefectura, quienes hasta el momento no podían hacerlo si eran designados los días de la elección en lugares lejanos a los que figuran en sus DNI.

Los electores mencionados solo estarán autorizados para votar en la categoría para presidente. La Casa Rosada confía en que la mayoría de esos votos se convertirán en activos propios, dada la aprobación que tiene la gestión de Patricia Bullrich en el interior de las fuerzas de seguridad, donde promulgó aumentos salariales y en las jubilaciones de todos los efectivos.

El martes pasado, Macri les envió un guiño a las Fuerzas Armadas, en la sede del Ministerio de Defensa. "Una de las cosas más importantes que logramos tiene que ver con la normalización de la imagen de las Fuerzas Armadas en la vida democrática, hoy son reconocidas y valoradas", afirmó en su discurso.

El primer mandatario resaltó las inversiones que se han realizado en materia castrense y dio el puntapié para la reforma del sistema de Defensa Nacional que tendrá como base el "libro blanco”, una nueva directiva de política que reestablece las prioridades de las Fuerzas Armadas. El Gobierno pretende devolverles protagonismo y que cooperen, en consonancia con las fuerzas de seguridad, en la lucha contra el narcotráfico y los controles fronterizos.

A cinco días de las PASO, Macri oficializa el último artilugio para robustecer su intención de voto. Mientras candidatos y funcionarios de Juntos por el Cambio continúan agitando el pedido para que la gente concurra a las urnas y potencian el libreto de la polarización, el presidente llamó a sus votantes a que manifiesten en público el apoyo a su gestión para atraer otras voluntades.