Diez días después de su reaparición pública en un acto político en Quilmes, el primero en el que participó desde que Javier Milei accedió a la Casa Rosada, Cristina Kirchner renovó este martes sus críticas al Gobierno libertario y cargó contra la Ley Bases, en particular contra el capítulo del Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI), al que calificó como un nuevo "estatuto legal del coloniaje".    

"Quiero referirme muy especialmente a un capítulo, a lo que yo llamo el estatuto legal del coloniaje versión siglo XXI.  El nuevo estatuto legal del coloniaje, economía extractivista sin valor agregado, sin generación de tecnología, sin Investigación ni Desarrollo es el RIGI", señaló, el mismo día en que, en un plenario de comisiones, el Senado comenzó a tratar tanto la Ley Bases como el capítulo fiscal, que ya obtuvieron media sanción en la Cámara de Diputados.

Junto a decenas de invitadas especiales y dirigentes de Unión por la Patria, la expresidente participó en un acto en el Instituto Patria, donde se inauguró el Salón de las Mujeres.

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Para la exmandataria, el "modelo neocolonial en el siglo XXI basado en el extractivismo sin valor agregado va a condenar a los argentinos una vez más a la desocupación que ya empieza a visualizarse y que va a ser más profunda".    

El RIGI es un capítulo de la Ley Bases que ofrece un marco de estabilidad fiscal de 30 años para las grandes inversiones mayores a los USD 200 millones, con exenciones impositivas y libertad para exportar sin liquidar dólares en el Banco Central a partir del tercer año de adhesión al régimen.    

Al dejar inaugurada la muestra, que podrá visitarse desde el próximo miércoles y que incluye imágenes de Eva Duarte de Perón, Alicia Moreau de Justo, Victoria Ocampo, Juana Azurduy, Mariquita Sánchez de Thompson, Alfonsina Storni, Lola Mora, Mercedes Sosa y Tita Merello, entre otras mujeres destacadas, la exvicepresidente disparó con artillería pesada contra La Libertad Avanza por abrazar un "concepto supremacista masculinista de características medievales".    

Se refirió, por ejemplo, a la propuesta que tiempo atrás hiciera la diputada Lilia Lemoine de renuncia a la paternidad y a las recientes afirmaciones del senador Francisco Paoltroni, quien, en una suerte de analogía con "La Bella Durmiente", aseguró que Milei era un príncipe que "le hizo el amor" a la sociedad y "la despertó".

"Es una pena que haya ese concepto supremacista masculinista de características medievales, sobre todo por parte de gente que se quiere arrogar la modernidad y la verdad que son más antiguos que la ventosa", resaltó.

Al igual que hizo en Quilmes, la exmandataria volvió a remarcar que el superávit que celebra el Gobierno es "trucho" y también puso la mira en la situación de las tarifas de los servicios públicos. 

"El lunes o martes suspendieron los aumentos de las tarifas previstos a partir de mayo. ¿Por qué? Simple. Porque iban a ser impagables para la gente", se contestó, y comentó que esto demuestra que "el problema no son los subsidios".   

En otro tramo de su extenso discurso, consideró que Milei "debería abandonar esa costumbre de estar hablando tonterías por el mundo acerca de uno que no existe, sobre socialismo y comunismo".  "Presidente: se cayó el muro de Berlín en 1989. ¿De qué comunismo me habla?", disparó.

"Ya se lo dije. Tiene mucho prejuicio, se lo comenté el día que asumió. Cuando ingresa le dije: ‘Colóquese a mi izquierda’. Me respondió: ‘A su izquierda, imposible’ . Y le volví a decir: ‘No vaya a creer, tiene muchos prejuicios y cuando se siente en el sillón de Rivadavia, se le van a caer unos cuantos", recordó.