Con el quórum entre algodones, la sesión especial pedida por bloques de la oposición dialoguista de la Cámara de Diputados para tratar diversos proyectos de ley que apuntan a investigar, pedir informes o interpelar a funcionarios involucrados en el cripto escándalo $Libra se pasó para el miércoles próximo.

"Creemos que estamos muy cerca. De mínima ya tenemos 125 y de máxima podríamos llegar a 140", señalaron a la agencia Noticias Argentinas altas fuentes de la bancada Democracia para Siempre, que confían en llegar a los 129 legisladores necesarios para habilitar la sesión.

De todos modos, la oposición camina sobre una fina cornisa para la construcción de esa mayoría y es consciente de que el Gobierno hará lo posible para voltear la sesión. 

No obstante, prevalece el optimismo. Como los diez proyectos del temario no tienen dictamen y por ende se requeriría de una improbable mayoría especial de dos tercios para su aprobación, la oposición tiene bajo la manga un plan B para ejecutar en el recinto.

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Se trata del pedido de emplazamiento de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Peticiones, Poderes y Reglamento, para que en un plazo de diez días trate el paquete de iniciativas, incluyendo la creación de una comisión investigadora.

En el nuevo pedido de sesión especial para el miércoles 12 de marzo a las 10 (originalmente la sesión había sido solicitada para el martes 11), además de aparecer las firmas de los diputados de Democracia para Siempre y Encuentro Federal, figura el nombre del larretista Álvaro González. 

Esta rúbrica del diputado nacional del PRO representa un dato no menor, ya que marca en qué cuadrante de la política eligió jugar el exjefe de Gobierno porteño de cara al escenario electoral de este año.

Democracia para Siempre, el bloque presidido por Pablo Juliano, tiene como máximo exponente a Facundo Manes, quien ganó un protagonismo inusitado en la Asamblea Legislativa a partir de las agresiones que le propinaron el presidente Javier Milei y el asesor Santiago Caputo. 

En el temario de la sesión aparecen todos los proyectos vinculados al "Libragate" a excepción de los que plantean el juicio político a Javier Milei, por considerar que se trataría de una medida extrema dado que el desenlace natural de ese procedimiento es la remoción del funcionario acusado, en este caso nada menos que el presidente de la República, lo que generaría un escenario de grave crisis institucional.