Cómo quedó el mapa nacional tras las elecciones presidenciales que ahora definirán mano a mano Massa y Milei
El oficialista dio vuelta el resultado de las PASO y se ubicó como el candidato más votado: qué provincias recuperó y en cuáles fue elegido el libertario, de cara a la segunda vuelta del próximo 19 de noviembre.
El representante de Unión por la Patria, Sergio Massa, se impuso con el 36,68% como el candidato más votado de las elecciones de este último domingo, dando vuelta el resultado de las PASO, por lo que irá a un balotaje con el postulante de La Libertad Avanza, Javier Milei, quien registró un 29,98% de los sufragios. De esta manera, ante el giro en la decisión de muchos votantes, hubo un fuerte cambio en el mapa electoral a nivel nacional.
El oficialismo obtuvo 9 millones de votos a lo largo y ancho de todo el país, con un triunfo en 13 provincias: así Buenos Aires, Santiago del Estero, Catamarca, Chaco, Formosa, Tucumán, La Rioja, Corrientes, Entre Ríos, La Pampa, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego se pintaron de celeste. Además, Massa se hizo fuerte en el Conurbano, donde solamente perdió en dos distritos.
Por su parte, el opositor libertario quedó al frente de las otras 10: Córdoba, Santa Fe, Mendoza, Misiones, Jujuy, Salta, San Juan, San Luis, Neuquén y Chubut se marcaron de violeta por la victoria allí de Milei.
A la hora de analizar los resultados de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich -que quedó tercera en las generales con el 23,83% de los votos- solamente logró mantener uno de los tres distritos donde se había impuesto en las PASO: la Ciudad de Buenos Aires.
El candidato liberal no pudo retener seis provincias en las que había sido el más votado en las PASO, ya que el ministro de Economía se las arrebató. Finalmente, también fueron para Unión por la Patria Tucumán, la Rioja, La Pampa, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego.
En tanto, Entre Ríos y Corrientes, que se habían teñido de amarillo el 13 de agosto en las primarias, este domingo último se colorearon también de celeste. Sorprendió lo ocurrido en suelo entrerriano, donde Rogelio Frigerio fue electo gobernador por Juntos por el Cambio, pero Bullrich no logró imponerse como candidata presidencial. Algo parecido pasó en Santa Fe, donde hace un mes la alianza opositora ganó la gobernación pero quedó tercera en la nacional.
Luego de conocerse la tendencia definitiva de los comicios, desde el búnker oficialista, Massa insistió en su idea de formar un “gobierno de unidad” e hizo énfasis en ponerle “punto final a la idea de la destrucción del otro”.
“Voy a convocar a un gobierno de unidad nacional, sobre la base de llamar a los mejores sin que importe su fuerza política”, dijo Massa. “Me tocó ser la cara, pero no tengan ni una duda que en la fuerza y en la voluntad de la Argentina encontré la energía que nos permitió que creciéramos casi 15 puntos de la primaria a hoy”, agregó.
Milei, que perdió terreno tras haber sido el gran batacazo de las PASO, tendió inmediatamente puentes con el resto de la oposición en su primer discurso como candidato al balotaje habiendo quedado en segundo lugar: "Todos los que queremos un cambio tenemos que trabajar juntos".