El Presidente envió al Congreso el proyecto de ley para nombrar 24 "capitales alternativas". Con la intención de fomentar "la descentralización y la federalización" del país, Alberto Fernández pretende que esas localidades funcionen como "sedes" para las reuniones de gabinete.

A la vez, en cada reunión, el Ejecutivo invitará a las autoridades locales para que den un pantallazo de la situación regional. La iniciativa se había sumado que se trataría en sesiones extraordinarias: desde el Frente de Todos espera que se vote cuando diputados y senadores bajen al recinto.

De acuerdo al proyecto de ley, la convocatoria quedará a cargo del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y la coordinación y el plan de trabajo que resulte del encuentro estará liderado por el ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro.

[recomendado postid=102459]

Promesa de campaña

La idea original era poner en práctica el programa pocos días después de la asunción de Fernández, con un viaje a Concordia, la “capital alternativa” de Entre Ríos y la ciudad con los peores índices de pobreza de la Argentina, donde sí se originó el lanzamiento del plan Argentina Contra el Hambre. Pero las intenciones del Presidente tropezaron con una agenda que no le da respiro y con demoras en la designación de muchos funcionarios de segundas y terceras líneas.

El proyecto de capitales alternativas había sido una de las principales promesas de campaña del Frente de Todos. En septiembre, por caso, Fernández había prometido dijo que ese iba a ser el primer decreto que firmaría si llegaba a ser presidente.

Varios cronistas que cubren Balcarce 50 indicaron que el objetivo del Gobierno es reforzar el vínculo con los gobernadores. Cabe destacar que, en las primeras semanas en la Casa de Gobierno, Fernández, Cafiero y De Pedro recibieron a los 24 mandatarios provinciales.

Una por una, las capitales alternativas.