Rosario no sale de la conmoción por el doble crimen de los números uno y dos de la barra brava de Rosario Central, Andrés "Pillín" Bracamonte y Daniel "Rana" Attardo, ocurrido el sábado pasado tras el partido de la Liga Profesional ante San Lorenzo. Por estas horas, una de las incógnitas pasa por el lugar del entierro del primero de los hinchas, ante la negativa a recibir el cuerpo de las autoridades de todos los cementerios de la ciudad.

Según informaron medios locales a la agencia Noticias Argentinas, el cadáver continúa en el Instituto Médico Legal, donde le practicaron la autopsia que determinó que recibió cinco disparos desde corta distancia.

Ante el temor que hay en Rosario por posibles represalias y una nueva crisis de seguridad, hasta ahora ningún cementerio quiere encargarse del entierro del barra.

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En un principio, se consultaron con alrededor de 19 cocherías para que pudieran albergar su cadáver, pero por un tema de seguridad todos sus dueños se negaron. Attardo, por el contrario, sí tuvo su sepelio y su entierro en el cementerio El Salvador.

Hace semanas, Bracamonte, quien había sufrido múltiples atentados contra su vida, presagió su homicidio y advirtió que Rosario se incendiaría si era asesinado.

"Si me matan la ciudad se incendia. 'Los Menores' se quieren quedar con parte de la ciudad. Cuando me dispararon en el parque Alem, ‘Los Monos’ me ofrecieron hacer una cacería esa misma noche. Me ofrecieron diez autos con gente armada para salir a buscar a los que me habían disparado. Yo los paré porque no quiero volver a la cárcel", había señalado hace unos días durante una entrevista.

"Los Menores" es una banda narco que opera en los barrios 7 de Septiembre, Villa La Bombacha, Emaús, Stella Maris y Hostal del Sol. Sus principales cabecillas están prófugos.