Luego de que el pasado viernes fuera declarado culpable por asociación ilícita y coautor de reiterados fraudes en el marco de la mega estafa piramidal de Generación Zoe, la Justicia correntina condenó a Leonardo Cositorto a 12 años de prisión.

"Desde el primer día que me senté aquí pedí que haya una justicia independiente, cosa de la que tengo dudas por algunas cosas que observé", manifestó entre lágrimas este martes, antes de escuchar el veredicto de los jueces Ricardo Carbajal, Jorge Carbone y Julio Duarte, al tiempo que sumó: "Jamás tuvimos la intención de estafar a nadie". Se trata del primer juicio que afrontó el líder de la organización, debido a que tiene otros procesos judiciales en otras provincias y ciudades de la Argentina.

La causa también apuntó contra otras cinco personas involucradas en una maniobra contra al menos 98 inversores. Para los considerados coautores Miguel Ángel Echegaray, Lucas Damián Camelino y Maximiliano Javier Batista las autoridades judiciales dispusieron ocho años de cárcel. En cuanto a los hermanos Nicolás y Javier Medina, fueron absueltos.

"Nunca existió el principio de inocencia en mi causa", declaró el sentenciado minutos antes de la lectura de la condena (Video: A24).

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En la mañana de la jornada decisiva, el empresario de 54 años había declarado en diálogo con A24: "Yo prefiero estar preso con los amigos que suelto con los indeseables". Además, denunció que está condenado "desde el primer día" porque "nunca existió el principio de inocencia" en su causa y no lo "dejaron" devolver el dinero.

"Sé que el mínimo son cinco años, pero veremos qué se resuelve. Mi prisión preventiva vence el próximo 4 de abril y si la condena no está firme debería salir. La pueden estirar si quieren hasta fines de mayo cuando se inicia la causa en Rosario, pero en sí queda poco", había expresado el líder de la organización a la agencia Noticias Argentinas, cuando por entonces se especulaba con 16 años de cárcel, según lo pedido por la fiscalía.

En la previa de la audiencia, Cositorto también afirmó que lo "quieren ver preso", que la Justicia le tiene "miedo" y enumeró: "Nos bloquearon las cuentas bancarias, nos sacaron 611 bitcoins, nos repusieron USD 155 millones en criptomonedas, nos quitaron 37 emprendimientos y se llevaron más de 30 autos".

En la lectura de sus argumentos para condenar al principal acusado, el juez Carbajal indicó que el empresario había vaciado y cerrado las cuentas bancarias de las víctimas dos meses antes de cumplir con los pagos prometidos.

Si bien la condena no quedó firme y las defensas de los imputados pueden apelar el fallo ante Casación, Cositorto deberá volver a la prisión de Bower, en Córdoba, donde estaba detenido antes de que comenzara el juicio en la localidad correntina.