En una serie de tweets, el diputado desaforado por sus pares del Congreso, publicó su postura al respecto y aseguró que votaría a favor del aborto si estuviera en su banca. "Más allá de mis creencias religiosas o de lo que yo haría o aconsejaría hacer si alguien me pidiera mi opinión, no me creo con derecho alguno de coartar a nadie su libertad de optar y muchísimo menos creo que nadie pueda imponer a otro sus creencias religiosas o valores morales, escribió.

El ex diputado kirchnerista aprovechó también para criticar a sus antiguos compañeros de banca. Allí fue cuando la diputada correntina del FPV Araceli Ferreyra lo cruzó: "Entendí q no estaba a favor. En esa linda y larga charla q tuvimos cuando lo visité en en Marcos Paz me contó de su pasión por el peronismo y sus convicciones religiosas. Le pido disculpas y en la próxima visita le llevo para q lo firme de puño y letra”.

Otro pase de factura y tensión en aumento: con ironía, vota De Vido a favor del aborto

"Ese electorado nos manda a comprometernos con los problemas reales de la gente, a no mirar para otro lado o que una supuesta objeción de conciencia pueda causar una sola muerte más por prácticas clandestinas que enriquecen a unos pocos y matan a muchas mujeres en nuestro país., amplió. Según averiguó elCanciller.com, De Vido se suele cruzar por los pabellones de la cárcen con un viejo camarada de los años kirchneristas: Luis D’Elía. Charlan y comentan -lo que se enteran a cuentagotas- de la realidad nacional. 

El ex ministro de Planificación fue desaforado luego de un pedido del juez Luis Rodríguez en octubre. Dos tercios de la Cámara de Diputados votaron por ello luego del fallo que luego fue bautizado como "la doctrina Irurzun”. Esa decisión de la Cámara Federal estableció que Julio De Vido podía intervenir en la investigación de la causa Río Turbio, debido a su condición de diputado y por la capacidad de influir en posibles testigos.