José Antonio Kast se consagró el último domingo como el ganador de las elecciones presidenciales de Chile con el 27,9% de los votos. Sin embargo, como no alcanzó el 50%, habrá ballotage en el país limítrofe. Así, el candidato neoliberal deberá enfrentarse con quien salió segundo: el exlíder estudiantil de izquierda Gabriel Boric, que obtuvo el 25,8% de los sufragios.

El cruce

Después de conocerse los resultados, el embajador argentino en Chile Rafael Bielsa dialogó con Radio Con Vos y El Destape Radio y calificó a Kast de “antiargentino”, “xenófobo” y “pinochetista” –en alusión al último dictador Augusto Pinochet–. Sus declaraciones despertaron un conflicto diplomático entre ambos países que tuvo un comunicado del ministro de Relaciones Exteriores del país andino y una aclaración y disculpas del Estado argentino.

“Si uno toma como elemento de juicio las manifestaciones públicas, Kast ha exhibido su anti-argentinismo como una etiqueta más de las frases que pronuncia", había afirmado Bielsa, quien además desarrolló: "Desde decirnos que hemos robado históricamente territorios, que tenemos que dejar de robar territorios a Chile, hasta todo tipo de expresiones xenófobas contra los argentinos, que yo las tengo archivadas, registradas, leídas y estudiadas". A su vez, lo diferenció de la actual “derecha de (el presidente Sebastián) Piñera”, dijo que “la de Kast es una derecha rupturista, pinochetista, que no teme decir su nombre", y lo comparó con Jair Bolsonaro o Donald Trump.

El repudio chileno

La administración de Piñera emitió un comunicado en rechazo a los dichos de Bielsa. "Estas expresiones representan una intromisión inaceptable en los asuntos internos de Chile y vulneran normas de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas", planteó el documento.

El comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile.

En tanto, siguió: "El Gobierno de Chile reitera su permanente disposición a mantener con la República Argentina las mejores relaciones políticas y diplomáticas, en el marco de la amistad histórica que nos une y del respeto recíproco que se merecen nuestros pueblos".

Las disculpas

Tras la polémica, el canciller argentino Santiago Cafiero llamó a su par chileno, Andrés Allamand, para poner paños fríos. Aclaró que fue una opinión personal del embajador e insistió en que Argentina trabajará “con el gobierno que resulte ganador una vez que finalice el proceso electoral” en el país limítrofe.

En la misma línea, esta mañana durante la tradicional conferencia en Casa Rosada, la portavoz Gabriela Cerruti aseguró que Bielsa hizo declaraciones "a título personal", que Argentina no se mete en los procesos electorales de otros países y minimizó el hecho asegurando que "no llegó a ser un entredicho".