En medio del conflicto entre Israel y el Líbano -cuya tensión va en aumento tras el asesinato del líder del grupo terrorista Hezbollah, Hassan Nasrallah- y ante la posibilidad de una invasión terrestre por parte del país gobernado por Benjamín Netanyahu, Joe Biden reveló este lunes su deseo de que "se detengan".

"Estoy más al tanto de lo que saben y me gustaría que parasen. Debería haber un alto el fuego ya", sostuvo el presidente de Estados Unidos en declaraciones a la prensa desde la Sala Roosevelt del Ala Oeste de la Casa Blanca.

Su pedido al cese del conflicto fue en respuesta a periodistas que le preguntaron si estaba al corriente de la posibilidad de que Israel prevea una operación terrestre sobre Líbano y si estaba de acuerdo con ello.

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En sintonía con su postura manifestada este lunes, Biden había advertido el domingo que una guerra total en Oriente Medio "debe ser evitada", y aseguró que pronto entablaría un diálogo con Netanyahu: "Hablaré con él y les diré cuando lo haga".

Sus comentarios tuvieron lugar luego de que el presidente de Irán señalara la necesidad de una "respuesta decisiva" tras una serie de atentados que Israel realizó en los últimos días contra el grupo militante Hezbollah, incluido el asesinato de Nasrallah.

Sobre este último, el mandatario del país norteamericano había considerado el sábado en un comunicado que es "una medida de justicia para sus muchas víctimas, incluyendo miles de civiles estadounidenses, israelíes y libaneses".

En los últimos días, Israel intensificó los bombardeos sobre Líbano, cuyas autoridades informaron más de un millar de fallecidos. En este marco, el Ejército del Estado judío eliminó a otro alto comandante del grupo extremista durante un nuevo bombardeo sobre el sur de Beirut que dejó más de 20 muertos, detallaron el domingo sus mandos militares.