Con el objetivo de pesificar todas las tarifas del servicio público, en el Ministerio de Desarrollo Productivo dispuso pagar en pesos una parte de la generación eléctrica, que tiene una injerencia del casi el 50% en las tarifas residenciales.

Se trata de la remuneración que perciben las generadoras de energía "spot". El Ejecutivo dispuso que pagará menos -y en pesos- por ese tipo de electricidad derivada por la térmica de algunas máquinas. Según trascendió desde Desarrollo, antes se avalaban contratos a US$ 69 por MwH (la unidad de medida del sector), mientras que ahora se avalarán transacciones en pesos, por el equivalente a un rango de entre US$ 60 y US$ 62 por megavatio/hora.

Los mayores generadores (Central Puerto, Enel) proveen energía eléctrica al sistema con esta modalidad. Utilizan máquinas con mayor antigüedad, consideradas menos eficientes frente a equipos más modernos. Sin embargo, su aporte es clave en el sistema eléctrico, sobre todo en los picos de mayor consumo.

Según los cálculos del Ministerio, este cambio implicaría un ahorro de unos 320 millones de dólares anuales. Y si bien la consecuencia directa no se vería en las boletas de luz en las casas, la modificación podría amainar el caso de un posible aumento.

Hidroeléctricas binacionales

Además, Kulfas aprovechó la ocasión para potenciar uno de sus caballitos de batalla: la represa Yacyreta. Por eso, en la resolución, dispuso que la generación de energía de esa central hidroelécctica (también la de Salto Grande) se pesificará, aunque no se reducirá su remuneración. La medida de aplicación será para las transacciones correspondientes a febrero de este año.

Tarifas

En diciembre el Gobierno adelantó una de sus promesas de campaña: congelar las tarifas de los servicios de agua, luz y gas. Lo hizo a través de la Ley de Emergencia Social, firmada en el Congreso. El plazo otorgado por el Parlamento fue de 180 días. A mediados de junio finalizaría el congelamiento. Por lo que suceda después aparece la grieta en el Frente de Todos.

En plena reunión con la misión del Fondo Monetario, Kulfas habría asegurado que no iba a existir un congelamiento permanente. Su objetivo, según trascendió, es hacer una revisión general que permita "generar tarifas razonables".

Ese off, que circuló por varios medios, se convirtió en una bola de nieve que anticipaba un nuevo cuadro tarifario. Y fue el propio Alberto Fernández quien salió a desmentirlo. "No está en cartera hoy el aumento de tarifas”, dijo el Presidente la semana pasada, y agregó que "el objetivo inmediato es en realidad revisar el que dejó la gestión de Mauricio Macri para entonces poder ver cómo se sigue".