“Lo vi por primera vez el otro día aquí. Pero al señor Vandenbroele no lo conocía”, dijo Amado Boudou delante de los jueces del Tribunal Oral Federal Nº4. Acusado por cohecho pasivo y negociaciones incompatibles, el ex vicepresidente de la Nación afirmó otra vez que no tiene vínculo con el que es señalado como su testaferro.

Los argumentos del Juez


The Old Fund

Durante la investigación, el juez Ariel Lijo sostuvo que si se conocían y marcó, a lo largo de 450 páginas que tiene el documento por el cual elevó la causa a juicio, varios de los puntos que los conectaban. Hizo hincapié en The Old Fund, la empresa adquirida por Vandenbroele que cobró más de siete millones de pesos por la reestructuración de la deuda de Formosa. Ahí, Boudou tuvo una intervención que consistió en modificar el convenio entre la provincia y el Estado Nacional. Es una causa aparte de Ciccone, donde el ex vice ya fue indagado.

El departamento

Otra de las claves fue el departamento de Puerto Madero de Boudou donde vivió Vandenbroele. El lugar fue alquilado por el abogado Fabián Carosso Donatiello pero se encontraron facturas de Cablevisión pagadas por el supuesto testaferro, así como también estaba el teléfono a su nombre. 

Las llamadas

Lijo también rescató que The Old Fund facturó pasajes a nombre de José María Nuñez Carmona, Jean Baptiste Boudou y Verónica Venturino de Boudou. Los entrecruzamientos de celulares fueron importantes para el juez: sostuvo que un celular abonado de la empresa llamó en dos ocasiones al abonado utilizado por el secretario privado del ex vicepresidente. Detalló, también, varios cruces telefónicos entre las personas en común que tienen ambos.


SI bien aclaró que el rol de Vandenbroele era permanecer oculto en la maniobra, consideró que no necesitaba ni una foto ni un video que pruebe la relación. De eso se quejó hoy Amado en su declaración, en la que no contestó preguntas de ninguna de las partes.

El otro destinatario de su enojo fue la familia Ciccone. A los primeros los viene señalándolo desde el comienzo de la causa y negó las reuniones en las cuales se había hablado de salvar Ciccone. Criticó, además, que no se esté juzgando la “ruta del dinero” de la causa.