El Gobierno logró este miércoles en Diputados la aprobación del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que firmó Javier Milei y habilita a un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). La sesión estuvo cargada de acusaciones y chicanas, y su tramo final coincidió con el inicio de una tensa marcha de jubilados que contó con la presencia de sindicatos, piqueteros, organizaciones de izquierda y La Cámpora.

El decreto presidencial no especifica el monto que recibirá el país tras la firma del acuerdo, ni tampoco los vencimientos, pero aclara que el dinero será utilizado para sanear la deuda pública y fortalecer las alicaídas reservas del Banco Central.

En su artículo 1°, el documento establece que se aprobarán "operaciones de crédito" contenidas en el "Programa de Facilidades Extendidas" que el Poder Ejecutivo pactará con el organismo multilateral, y que tendrán un "plazo de amortización de 10 años".

Los desembolsos que recibirá la administración libertaria se usarán, en primer lugar, para cancelar "las letras intransferibles" en dólares en poder del Banco Central, "en el marco de las atribuciones conferidas a la secretaría de Hacienda y de Finanzas", ambos bajo el ala del ministerio de Economía.

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"A tal efecto, se tomará la Letra Intransferible de vencimiento más cercano, a saber, la emitida originalmente mediante el artículo 1° de la Resolución N° 406 del 2 de junio de 2015 del entonces ministerio de Economía y Finanzas Públicas con vencimiento el 1° de junio de 2025; y sus subsiguientes en orden cronológico", detalló.

Por otro lado, los nuevos fondos se utilizarán para para subsanar "las operaciones de crédito público celebradas en el marco del Programa de Facilidades Extendidas del 2022", firmado por el entonces presidente, Alberto Fernández. Los vencimiento de la respectiva deuda ocurrirán durante los próximos cuatro años.

Según Luis Caputo, y el propio jefe de Estado, los desembolsos frescos permitirán reducir por completo la deuda pública, fortalecerán las reservas de la autoridad monetaria y ayudarán a continuar con el proceso de desaceleración de la inflación. 

A su vez, ayudarán a mejorar las condiciones para la liberación del cepo, que se eliminaría antes de fin de año. "Estamos haciendo todo para liberar las restricciones cambiarias. ¿Cuándo van a estar dadas esas condiciones? No lo puedo decir porque no sabemos cuánta plata nos va a dar el FMI, pero ese es el objetivo", afirmó Caputo en diálogo con A24 el pasado martes.

Ahora, con la aprobación de Diputados, el DNU no puede perder vigencia y el Gobierno se focalizará en las próximas instancias de la negociación. En primer lugar, se deberá publicar el acuerdo técnico, que es el entendimiento preliminar alcanzado entre los técnicos del FMI y la Argentina. Este punto aún no fue oficializado.

Luego se deberá avanzar en la elaboración y firma del Memorándum de Políticas Económicas y Financieras, que describe las políticas o compromisos -fiscales, cambiarios, monetarios- que se pretenden implementar. Y está la firma del Memorándum Técnico de Entendimiento, que plasma aspectos tales como los mecanismos de medición del déficit fiscal o la acumulación de reservas. 

Por último, esos documentos deberán ser enviados al Directorio del FMI, que deberá aprobarlo para su finalización. En el calendario del organismo aún no hay fecha para tratar el caso argentino.