Prorrogaron por seis meses la suspensión de las retenciones para los lácteos y eliminaron los reintegros
La primera medida tiene como fin mejorar la competitividad ante bajos precios internacionales. Sobre las devoluciones impositivas, el Gobierno señaló que “generan una erogación al Estado y perjudican el desarrollo de un mercado transparente".
Con el fin de promover la producción, mejorar la competitividad de la cadena y sostener al sector en un periodo de baja de precios internacionales, el Gobierno prorrogó la suspensión de las retenciones a los productos lácteos hasta fines de junio, al tiempo que anuló el régimen de reintegros de hasta un 5% de impuestos internos que regía para aquellos elaborados a base de leche, caseína y derivados con destino al exterior.
Así lo dispuso a través del Decreto 9/2024 publicado este jueves en el Boletín Oficial, que lleva las firmas del presidente, Javier Milei, del jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y del ministro de Economía, Luis Caputo.
De aprobarse el proyecto de “ley ómnibus” enviado al Congreso, la fijación de una alícuota de 0% para las retenciones al sector lácteo sería de carácter permanente. Por el momento, la nueva norma del Ejecutivo deja vigentes la retención cero y el reintegro cero “hasta el 30 de junio de 2024”.
Esta suspensión estaba vigente hasta el 31 de diciembre último tras una extensión anunciada en septiembre por el extitular del Palacio de Hacienda, Sergio Massa, frente a la sequía y la baja de los precios internacionales, que se había formalizado con el Decreto 506/2023 del pasado 3 de octubre.
Como contraprestación, los productos lácteos se regían por un tope mensual de reintegros impositivos del 5% como parte del programa Precios Justos, el cual finalizó con el cambio de gobierno.
Previamente, los productos lácteos eran gravados con derechos de exportación de 9% para la leche en polvo y 4,5% para los quesos, leches fluidas, lactosuero y manteca.
La nueva prórroga responde a la continuidad de los “bajos precios internacionales” para los productos lácteos que se registra desde el segundo semestre del año pasado, lo cual generó “una menor capacidad de pago de las industrias hacia los productores”, manifestaron ahora desde el Ejecutivo en los considerandos del decreto.
“En este contexto de baja de precios internacionales y una débil demanda del principal consumidor mundial, los volúmenes exportados, así como el ingreso de divisas por este concepto, se vieron afectados durante el año 2022, y agudizados durante el transcurso del año 2023, con una fuerte caída en comparación al mismo período del año 2022”, añadieron.
Además, explicaron que la prórroga resulta “necesaria” para “continuar y mejorar el nivel de ingresos de los productores y de la industria, promover el desarrollo e incentivo de la producción y el agregado de valor nacional, impulsar las ventas a mercados externos, mejorar la competitividad de la cadena y fortalecer el arraigo y permanencia de la población rural en cada región del país”.
Sin embargo, por otro lado, el decreto anula el régimen de reintegros que tenía el sector en los productos elaborados a base de leche, caseína y derivados.
El mismo consistía en la devolución total o parcial de los impuestos internos que se pagaban en las distintas etapas de producción, previo a la exportación, y consistía de un porcentaje que se aplica sobre el valor FOB de la mercadería a exportar. Los porcentajes de reintegros podían ascender hasta un 5%, según el producto.
Según argumentó el Gobierno, los reintegros “no sólo generan una erogación para el Estado, sino que perjudican el desarrollo de un mercado lácteo transparente y equitativo que requiere de reglas claras, justas e iguales para los diversos actores”.
En esa línea, señalaron que sostener esas devoluciones “arremete contra los principios de libre competencia fundamentales en nuestra economía actual”, y su eliminación persigue también “el objetivo de optimizar y tornar más efectivo el gasto público”.
Al igual que la reducción de las retenciones al 0%, la eliminación de los reintegros, por el momento, es temporaria: “Fíjase, desde el 1° de enero de 2024 y hasta el 30 de junio de 2024, inclusive, en un cero por ciento (0 %) el nivel del Reintegro a la Exportación (R.E.) aplicable a los productos elaborados con leche, leche bovina, bebidas a base de leche, caseína y sus derivados”.