En un año plagado de compras virtuales a raíz de la pandemia y en medio de la crisis económica, el Cyber Monday ilusionó a los usuarios. Pero volvió a defraudar. Las grandes cadenas, otra vez, remarcaron los precios días antes de publicar "las ofertas". Las quejas llegaron a la par del bombardeo publicitario.

Aunque antes del lunes circularon algunas páginas, como Baratómetro y MuyShopper, para revisar los verdaderos precios de los productos, Garbarino, Frávega y Mercado Libre fueron las empresas que más reclamos recibieron en las redes sociales. 

A la caza de distraídos, Frávega ofertó celulares a precios más caros que los costos regulares en compañías telefónicas y en modelos viejos. Garbarino mantuvo -y aumentó- los precios de los televisores y los catalogó como ofertados.

El promedio de descuento durante el evento fue de 28%, según estimó la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE). La categoría de electrodomésticos y tecnología, a pesar de ser la más buscada, fue la que menos porcentaje de oferta tuvo: un 20%. Además de las rebajas, lo atractivo era la financiación en cuotas. El periodista Horacio Cabak relató su experiencia: si compraba un sommier ahora, le llegaría el año que viene.

Aunque la propuesta eran las ventas de gran escala, la categoría Alimentos y Bebidas registró un incremento de 250%, según CACE. Lo más vendido en unidades fueron hamburguesas, galletitas, jabón líquido, papel higiénico y rollo de cocina.

Antes de que largue el CyberMonday, los trabajadores de Garbarino de la sucursal Lanús protestaron para denunciar por competencia desleal las ventas a través de internet, vaciamiento del local y falta de comunicación con el área de Recursos Humanos.

Las críticas al evento que tuvo vigencia desde el 2 hasta el 4 de noviembre se replicaron en las redes sociales. Algunos usuarios alertaron al resto y reclamos por irregularidades o estafas ante la Dirección Nacional de Defensa del Consumidor.