Los medicamentos ¿se suman? al control de precios
La industria farmacéutica se escuda en la inflación y el dólar. Los empresarios hablan de un “sustancial aporte” para garantizar “grandes coberturas” a través de obras sociales, prepagas y el PAMI.
El Gobierno viene embalado con el control de precios al observar un cumplimiento de casi un 78% en las góndolas de los supermercados. “No puede haber consumos esenciales como alimentos o medicamentos que no tengan algún grado de regulación del Estado”, advirtió este lunes el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti.
Por estas horas, en la Casa Rosada evalúan incluir también dentro del congelamiento a los medicamentos. Es que, según datos del Colegio de Farmacéuticos, los precios de ese rubro tuvieron un alza del 45% y los de mayor prescripción médica aumentaron 86% en lo que va del año. Con este panorama, Feletti se reunirá este martes con la ministra de Salud, Carla Vizzotti, donde se abordará este tema.
Los laboratorios se defienden y argumentan que los medicamentos están impactados por el tipo de cambio, debido a que una parte de ellos son importados o producidos con insumos que provienen desde el exterior.
Por otro lado, aseguran que vienen haciendo “grandes esfuerzos” para sostener la accesibilidad de los medicamentos a los principales financiadores, obras sociales y prepagas, incluso “con coberturas que llegan al 100% del valor para los pacientes”, como ocurre en tratamientos oncológicos, especiales y en el programa “Vivir Mejor” implementado por el PAMI. Desde el empresariado farmacéutico explican que vienen haciendo “un sustancial aporte” y rechazan el congelamiento de precios porque es “innecesario alterar las reglas de la libre competencia”.
Las cámaras también se respaldan en la inflación y explican que los valores van “en línea con la dinámica evolutiva de precios del IPC del INDEC”.
Acá es donde aparece el brollo para el Gobierno si se tiene en cuenta que el salario real está caído respecto de la inflación -las remuneraciones subieron 49,1% interanual contra 52,5% del IPC-. Y eso Feletti lo sabe. “No hay política de ingresos que se sostenga si en los consumos esenciales hay apropiaciones indebidas”, justificó el funcionario público. Y agregó: “Todos sabemos que, a los monopolios, si no se los regula, ajustan por precio y no por cantidad”.
El antecedente de Precios Máximos
El 22 de abril el Gobierno firmó un acuerdo de precios máximos con la industria farmacéutica para abastecer a todo el país de medicamentos a unidades de terapia intensiva. La duración de esta medida es por seis meses y contempla a cinco medicamentos de vital importancia para el tratamiento de pacientes internados: atracurio, bromuro de pancuronio, fentanilo, midazolam y propofol.
Otras herramientas que el Gobierno tiene a mano son: precio basado en el costo de producción, regulación de la tasa de retorno o beneficio, precios de referencia externos e internacionales, precio basado en el valor (que depende del costo del tratamiento y del valor terapéutico o económico adicional que aporta).
Todo parece indicar que, en los próximos días, el Estado anunciará una medida similar a lo que sucedió con los alimentos y las bebidas. Esta vez, será otro el sector empresario que se siente a negociar en la mesa redonda. Feletti, de a poco, va sumando a todos los actores de la producción, más allá que exista consenso o no sobre la decisión final.