El Senado puso en marcha este martes el debate en comisión de la reforma de la Ley de Alquileres, que ya cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados, y desde Juntos por el Cambio reclamaron “acelerar” el tratamiento de la iniciativa a raíz de la incertidumbre que generó en el mercado la posible modificación del marco normativo. Sin embargo, la coalición opositora no consiguió el dictamen que necesitaba para trasladarlo al recinto, ya que el oficialismo planteó que se requieren “modificaciones” y “una discusión más amplia”.

En medio de acusaciones cruzadas entre el oficialismo y la oposición, el tratamiento de la iniciativa quedó empantanado porque, si bien se acordó celebrar una nueva reunión con la participación de diversas asociaciones de propietarios e inquilinos, no se definió una fecha para el encuentro.

Tras la aprobación en la Cámara baja de la reforma, que, entre otros puntos, reduce de tres a dos años el plazo de los contratos y establece una indexación cuatrimestral sin atarse a indicadores fijos, muchos propietarios pusieron en pausa sus alquileres a la espera de la resolución del debate en el Senado. Esta coyuntura agravó la ya de por sí delicada situación de millones de inquilinos que ven reducida la oferta de inmuebles en alquiler, sumado a la disparada inflacionaria de los precios.

No obstante, el camino para lograr la media sanción que falta será muy complejo para Juntos por el Cambio, que impulsa la reforma de la controvertida ley. En el caso de que supere la instancia del trabajo en comisiones y haya dictamen, la alianza opositora necesita llegar al menos a 37 votos en el Senado para sancionarla.

Hoy, Juntos por el Cambio tiene 33 senadores, por lo que será necesario contar con el apoyo de al menos otros cuatro de aquellos bloques minoritarios que no responden al oficialismo.

Al abrir la ronda de oradores en el plenario de las comisiones de Legislación General y Presupuesto y Hacienda, el senador chaqueño Víctor Zimmermann, de la Unión Cívica Radical, resaltó la necesidad de los inquilinos y propietarios de darle "celeridad" al proceso de tratamiento en la Cámara alta. "Es imprescindible que podamos avanzar lo antes posible y en un tiempo prudencial podamos sancionar esta ley", instó el opositor. 

Si bien valoró que existen otros proyectos a la vista de parte de senadores de Juntos por el Cambio, Zimmermann evaluó que "ante esta situación que vive el país se necesita sacar un dictamen lo antes posible y sancionar esta media sanción que viene de Diputados". "Todos sabemos que no es la mejor ley, pero en el marco de lo que nos preocupa a todos tenemos que darle celeridad para sacar este dictamen y dar una solución posible", insistió.

Por el oficialismo, Juliana Di Tullio (Unidad Ciudadana) coincidió en que es importante "acelerar el estudio de los proyectos" y darle "celeridad" al proceso, pero aclaró que eso no significa acompañar la media sanción que la oposición consiguió en Diputados, la cual, a su entender, no aporta "ninguna solución" al problema. 

"Necesitamos celeridad, pero realmente me gustaría escuchar a los involucrados e involucradas en este tema, y sobre todo a la parte más débil, que son los millones de personas que necesitan resolver su problema habitacional", expresó la senadora kirchnerista, quien aclaró que no está planteando que "pase una eternidad" de tiempo de debate, "sino por lo menos un par de semanas".

A su criterio, no hay "ninguna solución" en esta media sanción que proviene de Diputados, en especial en lo que refiere al plazo de los contratos. "No veo que vaya a resolver el problema. Quiero quedarme tranquila que mi voto va a ser consecuente con lo que pienso", expresó.

Para Di Tullio, hay que dar un debate más integral sobre la emergencia habitacional, que implica poner sobre la mesa la regulación de los alquileres temporarios y hacer "legislación comparada".

A su turno, el radical riojano Julio Martínez advirtió que en la actualidad el mercado de alquileres está virtualmente "sin ley", porque no se están cerrando contratos conforme a la normativa vigente, que "no se cumple".

Por su parte, Maurice Closs, del Frente de Todos, pidió evitar un trámite exprés y aseguró que "el Senado se tiene que tomar un tiempo y, si hay consenso, se tiene que votar una ley". "Nos tenemos que tomar los días que hagan falta, tampoco un siglo entero", aclaró el misionero. 

La senadora del PRO Guadalupe Tagliaferri acusó al oficialismo de buscar "dilatar" el tratamiento de la ley e inclusive de bloquearlo, por lo que puso en duda que el Frente de Todos busque tomarse más tiempo para estudiar el alcance de los distintos proyectos en la materia. "Ustedes son especialistas en despachar dictámenes en dos minutos. Entonces, no nos vengan con el cuento de que quieren seguir debatiéndolo. No tienen ninguna intención de aprobarlo", sentenció. 

La senadora María Inés Pilatti Vergara, del Frente de Todos, pidió "parar la pelota" y analizar "unos meses" los proyectos y no convalidar una "aparente solución que en vez de mejorar las cosas las enrarece o perjudica a unos y otros".  

"Proponemos parar la pelota, hacer trabajar a asesores, traer asociaciones de inquilinos y propietarios, y después concluir. No digo tirar la pelota para el año que viene, sino unos meses", sugirió la chaqueña, que aseguró que "estudiando y analizando integralmente se va a encontrar una salida más justa, aunque no sean tan rápida para unos y otros". 

Una de las senadoras que todavía no definió su voto y que podría inclinar la balanza para un lado o para el otro es la misionera Magdalena Solari Quintana, quien le preguntó a Zimmermann si desde Juntos por el Cambio tenían previsto incorporar modificaciones a la media sanción de Diputados. El legislador radical le contestó que no lo tiene previsto, habida cuenta del apremio con el que se requiere contar con un instrumento legal que dé certidumbre a un mercado que se paralizó en la última semana por el paso dado en la Cámara baja.

Seguidamente, el senador Martín Lousteau llamó a votar la media sanción a pesar de reconocer que "no es la mejor ley". "La actual normativa pretendía proteger al eslabón más débil de la cadena y lo está matando. Generó el efecto contrario al que se pretendía. La aceptación de que esto es así está en los múltiples proyectos de ley que se presentaron de todos los bloques", apuntó.

 Al respecto, subrayó que "si el propietario ve que alguna de las condiciones de la ley le genera incertidumbre se lo cobra por adelantado" y "entonces el que tiene que renovar alquiler se queda en la calle". "Si dejamos la media sanción en un limbo por una cuestión política vamos a generar un problema mucho más grande", advirtió.

El presidente de la Comisión de Presupuesto, Ricardo Guerra (Frente de Todos), cuestionó el proyecto opositor porque pretende tratar a propietarios e inquilinos como si estuvieran en pie de igualdad. "Como en todo contrato hay dos partes y una tiene una posición de poder frente a otra. No podemos tratar como iguales a quienes no son iguales. Todo contrato debe tener un equilibrio y tener en cuenta el contexto y las posiciones de fuerza", analizó el riojano.

Por último, la vicepresidenta del interbloque del Frente de Todos, Anabel Fernández Sagasti, negó que desde el oficialismo tengan intenciones de "dormir o dilatar" el tratamiento y explicó que "lo que sucede" es que no están de acuerdo con el contenido de esa media sanción.

Un dato a considerar es que el proyecto tiene un año de plazo para su tratamiento. Si no se debate antes del 10 de diciembre, podría incluirse en sesiones extraordinarias o ventilarse durante el período ordinario 2024 a partir del 1 de marzo.

En el caso de dilatarse su tratamiento, llegaría en 2024 a un Congreso conformado por nuevos representantes, lo que constituiría un mayor escollo para los cambios que se intentan incluir.