Mientras los inquilinos que renuevan contrato en agosto deberán afrontar un ajuste de más del 100%, empresarios del sector inmobiliario advirtieron que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires cuenta con menos de 1.000 propiedades en oferta, situación que atribuyen a la norma 27.551, más conocida como Ley de Alquileres.

El presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, Alejandro Bennazar, aseguró: “Antes de la Ley de Alquileres, hace tres años, había 20.000 unidades en oferta en la Ciudad de Buenos Aires. Después de la ley, ahora, hay 936. Y ese número sigue bajando”. En este sentido, sostuvo que la norma sancionada en 2020 “desmadra el mercado”.

De todas formas, aclaró que desde la Cámara no buscan derogar la ley “porque no sabemos qué pasaría después”, aunque planteó la necesidad de crear “una mesa nacional de alquileres, porque recomponer la oferta de inmuebles, en todo el país, llevaría años”.

Frente a esta situación, los empresarios presentaron ante el Congreso una iniciativa para reducir a 24 meses el plazo de los alquileres, que en la actualidad es de tres años. A su vez, pretenden actualizar los precios de los arrendamientos cada cuatro meses “como mínimo”, mientras que la ley establece que “solo pueden realizarse ajustes anuales”.

Eso revertiría la situación en el mercado y aumentaría un poco la oferta. Es que para bajar los precios, hay que aumentar la oferta”, aseguró Bennazar en diálogo con Radio Rivadavia.

La disminución en la oferta de propiedades para alquilar impacta en la complicada situación de los inquilinos, que en agosto se enfrentarán a un nuevo aumento: quienes renueven contrato este mes tendrán un ajuste de casi 110% en el precio del alquiler, según la aplicación del Índice de Contratos de Locación (ICL) del Banco Central de la República Argentina (BCRA).

Al aumento de los precios de los contratos y la disminución de la oferta de propiedades para alquilar, se suman los arrendamientos temporarios para turistas y los contratos en dólares que escapan a la Ley de Alquileres, lo que complica aún más la situación de los inquilinos.

En julio, la disminución de la oferta de propiedades en alquiler había generado un aumento del 11,3%, lo que implicó un aumento acumulado del 86,9% por encima de la inflación en los primeros siete meses de 2023.