Sin esperar a que lo discuta el Congreso de la Nación, que presiona para avanzar con el debate de una nueva ley de movilidad previsional, el Gobierno decidió promulgar por decreto una nueva fórmula de actualización de las jubilaciones para compensar la pérdida del poder adquisitivo de los últimos meses.

Según se confirmará en las próximas horas, y que trascendió de fuentes del sistema previsional, las jubilaciones y pensiones se actualizarían en abril por el Índice de Precios al Consumidor (IPC), más un porcentaje extra, que rondaría entre el 12% y el 14% por la inflación de enero. 

Hecho este empalme, el Gobierno pretende que desde mayo los haberes se actualicen por la inflación mensual.

De esta manera, la Casa Rosada buscará adelantarse a la discusión que pretende dar la oposición en el Congreso.    

TE PODRÍA INTERESAR: El Gobierno presentará proyectos para modificar las leyes de seguridad interior, legítima defensa y endurecer las penas para organizadores de piquetes

En un principio, la gestión de Javier Milei pretendía que la nueva fórmula jubilatoria se tratara como un capítulo dentro de la nueva Ley Ómnibus, que, de acuerdo a los tiempos que quiere manejar la Casa Rosada, se debatiría en la Cámara de Diputados recién a mediados de abril.    

Si bien el relanzamiento de la meganormativa viene cosechando consensos en buena parte de su contenido, tanto el bloque PRO como la Unión Cívica Radical y Hacemos Coalición Federal, los más dialoguistas con el oficialismo, le plantearon al Gobierno que era imperioso cambiar cuanto antes la fórmula previsional, luego de la fuerte pérdida del poder adquisitivo que tuvieron los haberes jubilatorios en los primeros dos meses de este año.    

En tanto, los diputados opositores de la Comisión de Previsión y Seguridad Social decidieron impulsar una ley de movilidad jubilatoria por su cuenta.    

Ante la falta de acuerdos por este tema, el Poder Ejecutivo decidió anticiparse y avanzar por decreto con la fórmula que diseñó el equipo del ministro de Economía, Luis Caputo.    

La utilización de este instrumento jurídico fue una alternativa que se debatió mucho en el seno del Gobierno en los últimos días, porque la primera intención era que este tema tuviera fuerza de ley. Pero finalmente se definió avanzar de forma unilateral, sin llevarlo al Congreso.    

En el borrador de la nueva Ley Bases, el Ejecutivo había propuesto una fórmula jubilatoria que indexe por inflación a partir de abril con una compensación adicional del 10% por la inflación de enero. 

Los bloques dialoguistas de Diputados, por su parte, exigían una compensación mayor, que contemplara enteramente lo que los jubilados y pensionados perdieron por la inflación del primer mes del año, que fue de 20,6%.

"Durante las últimas semanas hemos hecho un gran esfuerzo para visibilizar la situación que atraviesan los jubilados y priorizar en la agenda política la necesidad de una nueva fórmula de movilidad. Valió la pena, con el DNU estamos frente a un avance. El Gobierno no pudo seguir evadiendo la realidad ni dilatar la solución frente a la urgencia del tema, sino los jubilados iban a seguir perdiendo", dijo el diputado Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica.

Mientras tanto, la UCR también celebró la decisión del Ejecutivo de tomar la inflación como parámetro para la actualización, pero hizo una objeción. "12% es más que 0%, pero la inflación de enero fue 20%", explicó en un comunicado.