En medio de la expectativa por la presentación inédita de un Presidente de la Nación en el Congreso para presentar el Presupuesto previsto para un año de gestión, algo que suele estar a cargo del ministro de Economía, Javier Milei vuelve a romper los estereotipos y la tradición política para llevar su proyección para el 2025 en materia de ingresos y gastos públicos, que estará enfocada en cuatro ejes centrales en pos de sostener el equilibrio fiscal

El mandatario libertario llegará esta noche al recinto de sesiones parlamentarias -y transmitirá una cadena nacional desde las 21 por aproximadamente 40 minutos- luego de haber obtenido una victoria después de varios reveses legislativos. Tras una serie de negociaciones con la oposición más dialoguista, pudo ratificar el veto a la ley jubilatoria, con dos tercios de las voluntades a su favor. Con ese capital político se parará frente a los representantes del Poder Legislativo a contarles cuál es su proyección respecto de las cuentas públicas.

Tras haber anunciado que vetará en forma total el aumento del presupuesto universitario y luego de que el Congreso derogue el decreto que asignaba 100 mil millones de pesos reservados a la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE), es el turno de la "ley de leyes". En este contexto, el oficialismo tiene otra misión complicada en lo que respecta a la aprobación de su presupuesto para el 2025, sobre todo porque es minoría en las dos cámaras, lo cual lo obliga a intensas conversaciones y acuerdos con los bloques dialoguistas.

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El Ejecutivo ya anticipó cuáles serán los ejes de su esquema de cálculos. En julio último, el titular del Palacio de Hacienda, Luis Caputo, envió un adelanto al Congreso de la Nación, con un mensaje en el que planteó los cuatro principales ejes que incluía el documento: el equilibrio fiscal sostenido; la política social sin intermediación; la modernización y simplificación del Estado y, por último, fortalecer las áreas de Seguridad interior y Defensa.

Además, en el mismo pliego sobre el que se explayará Milei estará el tipo de cambio nominal, la inflación proyectada, cuál será la presión tributaria, los impuestos sobre combustibles y las privatizaciones de las empresas públicas proyectadas, entre otros asuntos de gran interés.

En el informe enviado por Caputo, el Gobierno se plantea mantener "las condiciones de estabilidad macroeconómica que permitan el despegue definitivo de las potencialidades productivas del país, generando un ambiente favorable para el incremento de la inversión privada, una mejora de la productividad, y el crecimiento de la actividad, del empleo y los ingresos".

"Es prioridad de esta gestión continuar con la política de déficit cero, fortaleciendo la eficacia y eficiencia del gasto público, haciendo énfasis en la reducción del gasto político para dar prioridad al sostenimiento de ingresos de los sectores de mayor vulnerabilidad", agregó el oficialismo en su avance, que se espera que Milei defienda a capa y espada en su alocución.

Sobre las previsiones impositivas para el 2025, se estima que la recaudación de gravámenes nacionales y de aportes y contribuciones aumentará un 54,4% respecto a la estimación para el 2024, reduciéndose 0,45 puntos del PIB en comparación con el año anterior.

"La presión tributaria pasaría de 21,61% del PIB en el año 2024 a 21,16% en el año 2025. Este cambio en la presión impositiva total responde al efecto neto de modificaciones en el contexto macroeconómico y de medidas de política y administración tributaria, destacándose la menor recaudación como consecuencia de la finalización de la vigencia del impuesto PAIS", destaca.

Plantea como otra meta central la eliminación de las organizaciones sociales para la asistencia comunitaria y, en ese sentido, señala que habrá "acompañamiento social sin intermediaciones, realizando esfuerzos significativos para ampliar la asistencia social a madres y niños en los sectores más vulnerables y proteger el poder adquisitivo de las jubilaciones y pensiones".

Otro aspecto clave de la propuesta es la reforma del Estado: "El objetivo de esta gestión es hacer un Estado moderno, eficaz, eficiente, simple y útil para los ciudadanos, ocupado en sus funciones esenciales para no entorpecer las condiciones para el desarrollo del sector privado, favoreciendo la libre empresa". "La simplificación y racionalización de la estructura estatal planteada con el objetivo de lograr un uso eficaz y eficiente de los recursos aportados por los ciudadanos", subraya en el informe enviado como anticipo a Diputados.

En materia de Seguridad y Defensa, se apuntalará ambos sectores mediante la compra de nuevo equipamiento ya que indica que la administración libertaria "considera que para que un país sea próspero debe sostener firmemente su soberanía territorial y para ello debe contar con Fuerzas Armadas capaces de defender sus fronteras y erradicar o desalentar posibles amenazas externas".

"El fortalecimiento y revalorización de las fuerzas de la Defensa continuará siendo una prioridad, como así también será prioridad seguir dotando a las fuerzas federales del equipamiento necesario y de la capacitación continua para garantizar la seguridad interior como un derecho de todos los argentinos, con énfasis en la prevención del delito y la investigación del crimen organizado".